Las carencias de Tuvisa siguen siendo visibles. Los usuarios y usuarias de los autobuses urbanos llevan todo el mes de diciembre sufriendo retrasos en las líneas de autobuses.
Las frecuencias de diez minutos en días laborables no se están cumpliendo, pero tampoco en festivos, días en los que los buses pasan cada veinte minutos.
Según el comité de empresa, en lo que va de diciembre se han perdido “312 jornadas de ocho horas por la huelga empresarial”. Así es como denomina a los servicios no prestados.
En definitiva, 312 vehículos menos que han salido de las cocheras. “Una media de entre quince y veinte autobuses menos cada día llegando a 30 el día 22 y a 27 el día 26”, pone como ejemplos un representante de los trabajadores.
Preguntado el Ayuntamiento por este dato, apunta que es una cifra de elaboración puramente sindical. Al respecto, Tuvisa únicamente señala que no ha cambiado el modo de actuar en lo tocante a la cobertura de este tipo de servicios.
Explica que, cuando se necesita, “se llama al personal que voluntariamente puede trabajar en estos casos y donde antes surgían personas voluntarias para cubrir servicios, ahora no”.
Cabe preguntarse, entonces, por qué estalla esta situación en diciembre. Según el comité, “la carga de trabajo es brutal, faltan chóferes, pero el problema no es de ahora, es estructural, lo que sucede es que la plantilla ya está quemada, harta de aguantar mucho tiempo así y ha dicho: “hasta aquí hemos llegado”.
Apunta un representante del comité que, hasta ahora, cuando lo necesitaba, Tuvisa echaba mano de los conductores que estaban librando para cubrir el servicio. “Quince y hasta veinte personas han estado saliendo a trabajar en sus horas de descanso”, dice.
En cambio, ahora, “ya no hay conductores para tapar los huecos, se han hartado y plantado. Han generado una bola de tal magnitud que...”, sostiene.
“Una cosa es cubrir un problema puntual y otra que se haya convertido en una situación generalizada”, añade.
Faltan chóferes
El concejal responsable de Tuvisa, Iñaki Gurtubai, reconoce que faltan chóferes en momentos puntuales, incluso la dificultad para contratar conductores.
No obstante, el Ayuntamiento también achaca la situación a una especie de huelga encubierta de la plantilla que, además de las movilizaciones, realiza otro tipo de presiones, caso de los delegados sindicales que se han cogido al mismo tiempo todas las horas que les corresponden, argumentó hace dos semanas el Ayuntamiento.
Sin embargo, el comité opina que es el Ayuntamiento el que no quiere aprobar una nueva oposición en Tuvisa porque “no quiere consolidar los puestos de trabajo”.
Explica que “la última OPE fue hace diez años y que en la bolsa de trabajo actual hay 730 personas, pero más de la mitad están desactivadas”.
Indica, además, que “más de la mitad del personal es eventual que se están contratando conductores a través de Lanbide y hasta por Infojobs”.
