Tal y como adelantó en exclusiva DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA hace unas semanas, el Hospital de Txagorritxu de Vitoria, ha estrenado este mismo lunes 16 de octubre, su nueva Unidad de Recuperación Post-Anestésica (URPA) con el objetivo de ofrecer una hospitalización más prolongada a todos aquellos pacientes que requieran una especial atención postoperatoria.
En este sentido, el nuevo espacio, diseñado para cubrir las demandas del nuevo bloque quirúrgico, ha supuesto una inversión de cerca de 6 millones de euros, en la que entre otros asuntos, se ha incrementado el número de boxes de 18 a un total de 38 en la segunda planta del edificio.
La Consejera de Salud del País Vasco, Gotzone Sagardui, junto con la Directora General de Osakidetza, Rosa Pérez, y el Director Gerente De OSI Araba, José María Pérez, ha visitado la nueva URPA esta mañana para detallar las nuevas instalaciones hospitalarias, realizando un especial hincapié en el área de Pediatría.
“Se han equipado cinco unidades de URPA totalmente adaptadas a las necesidades de los pacientes pediátricos, así como a los familiares acompañantes durante el proceso”, ha explicado Sagardui en una de las salas.
Asimismo, la hospitalización más extendida que ofrece la URPA permitirá también monitorizar de manera más exhaustiva la recuperación de los pacientes, dedicando el tiempo necesario para una cómoda mejoría tras la operación. “Se ofrecerá una atención más centrada en el paciente y sus necesidades específicas”, ha afirmado la consejera.
Por otro lado Osakidetza ha apuntado que, cada año, se atienden una media de 8.000 pacientes en la Unidad de Recuperación Post-Anestésica, que reciben “cuidados postanestésicos inmediatos tras someterse a cirugías”.
Detalles de la nueva URPA
Con una superficie de 1.250 metros cuadrados, la nueva URPA está dotada de dos boxes de aislamiento individual para pacientes inmunodeprimidos o que requieran de un “estricto aislamiento microbiológico”, tal y como ha anunciado Osakidetza.
Asimismo, se han habilitado cinco salas para estancias superiores a 24 horas y otros cinco boxes para pacientes de Pediatría, con espacio para los acompañantes.
Por otro lado, la nueva URPA contará con sala de información y otra de espera, además de una zona de cuidados de pacientes a la que se suma un área de soporte clínico con varios controles de enfermería y almacenes de farmacia y de material fungible.
También cuenta con una sala de trabajo, con despachos, habitaciones para profesionales de guardia además de una zona de descanso personal.
“Se han creado boxes específicos para realizar intervenciones que no requieran necesariamente de un quirófano además de unidades específicas de aislamiento para casos en los que los enfermos necesiten medidas especiales de aislamiento”, ha concretado Sagardui.
Modernización de los equipos
La unidad está equipada con una “tecnología de vanguardia” y unos “recursos materiales de última generación”, lo que ha supuesto una inversión de cerca de un millón de euros.
“Con las nuevas instalaciones, los profesionales van a poder mejorar los protocolos y las condiciones en las que se ofrecía ese servicio, adecuándose a las nuevas necesidades”, ha asegurado la consejera.
Asimismo, el espacio cuenta con un conjunto de instrumentos y dispositivos avanzados como un ecógrafo, un videoendoscopio, un electrocardiógrafo, respirador o un monitor desfibrilador con marcapasos, entre otros.
Kirutrack
El sistema Kirutrack tiene como fin proporcionar información a tiempo real a través de SMS en las intervenciones quirúrgicas programadas y durante el posoperatorio. De está manera, será posible informar a los familiares o acompañantes de la ubicación y traslado del paciente así como de la finalización de la intervención o la recomendación de acudir al punto de información.
Tal y como señala Osakidetza, el objetivo no es otro que mejorar la “satisfacción de los acompañantes” además de reducir la ansiedad y proporcionar una información hospitalaria eficaz.
