El consejo de administración de Tuvisa, la sociedad municipal de autobuses urbanos de Vitoria, ha elegido este martes al jeltzale Iñaki Gurtubai, actual concejal de Tráfico, como su nuevo presidente, gracias al pacto entre el equipo de gobierno (PSE/PNV) con el Partido Popular (PP).

Raimundo Ruiz de Escudero (EAJ/PNV), que en la anterior legislatura había detentado este cargo, será ahora el vicepresidente de esta sociedad clave dentro de las políticas de movilidad sostenible y saludable.

De esta forma, con la renovación del consejo de administración y la elección de su nuevo presidente, Tuvisa cuenta ya con "plena operatividad" para seguir desarrollando las diferentes líneas de trabajo del servicio municipal del transporte urbano.

El punto de inflexión para este acuerdo político, que estaba bloqueado desde la investidura de Maider Etxebarria como alcaldesa el pasado 17 de junio, han sido los votos del Partido Popular, que como ha destacado, han servido para conseguir el compromiso del Gobierno de PSOE y PNV, que no tienen mayoría absoluta, a cambio de realizar una auditoría económica del BEI.

Cabe recordar que este nuevo medio de transporte fue el proyecto que más criticaron los populares durante la pasada legislatura al ser también uno de los más ambiciosos realizados hasta la fecha en esta ciudad. Motivo por el que insistieron en hacer un examen de todo los gastos que estaban acarreando a las arcas municipales.

Condiciones de la auditoría

En cuanto a las condiciones para la auditoria, tendrá que hacerse en el plazo de tres meses, a cargo del interventor municipal.

Y recogerá, como mínimo, el gasto total de la infraestructura, instalaciones y reformas realizadas para su puesta en funcionamiento, todos los contratos relacionados con la implantación del BEI y todos sus costes de mantenimiento”.

Asimismo, mediante este acuerdo, el equipo de gobierno se comprometen también a que Tuvisa adquiera “10 nuevos autobuses eléctricos en el plazo máximo de 100 días”.

En este caso, “si el Ayuntamiento no recibiera ayudas europeas para ello, el Departamento de Hacienda garantizará la financiación necesaria para comprarlos”.

Además, el Partido Popular también ofreció sus votos para lograr un acuerdo esta tarde en el consejo Ensanche 21, como finalmente así se ha logrado, porque “este Gobierno está en minoría y PSOE y PNV tienen que buscar acuerdos para que la ciudad avance”.

Desalojo de okupas

En este caso, para apoyar la presidencia de Ensanche 21, el Partido Popular ha conseguido “dos compromisos muy claros”: “aprobar 2,5 millones de euros anuales en ayudas a la rehabilitación de viviendas durante cuatro años para todos los barrios de Vitoria” y “agilizar el desalojo de los okupas del Casco Medieval”.

“El Partido Popular esta aquí para ser útil a los vitorianos"

Rehabilitación de viviendas

En cuanto a las ayudas de rehabilitación de viviendas, "que llevaban sin aprobarse desde 2019", se volverán a convocar anualmente, y durante toda la legislatura, con las mismas bases que la última convocatoria, la de 2018, y con una cuantía de 2 millones de euros al año, salvo las zonas que ya cuentan con convocatorias plurianuales específicas.-

En cuanto al desalojo de los okupas del Casco Viejo, el compromiso es “agilizar el procedimiento de estas viviendas ocupadas en el Casco Medieval que son propiedad de Ensanche 21”.

Para ello, “en el plazo de seis meses, Ensanche 21 transmitirá las viviendas ocupadas al departamento municipal de Hacienda para culminar el proceso de desalojo”.

Su líder, Ainhoa Domaica, subraya que en esta legislatura “el Partido Popular de Vitoria va a jugar un papel determinante y clave porque así lo han decidido los vitorianos”.