La capital alavesa inicia la implantación del quinto contenedor de recogida de residuos en la ciudad. Se trata de un nuevo 'container' de basura orgánica con chip que se comenzará a utilizar el 14 de octubre en el barrio de Lakua para extenderse hasta la primavera del próximo año a lo largo y ancho de la ciudad. Un nuevo depósito para lograr los objetivos en reciclaje marcados por Europa y que conlleva una "transformación profunda" del sistema de recogida de residuos en Gasteiz.

Contenedor electrónico

El 47% de la basura que se produce en los hogares es orgánica. Cada día se genera una gran volumen de residuo orgánico que si se gestiona correctamente "puede transformarse en abono limpio y usable". Estos desechos suponen el 30% del total del residuo urbano que se genera en Vitoria.

El Ayuntamiento arranca la implantación de un nuevo contenedor electrónico para recoger este tipo de residuos que, como novedad, requiere de forma "imprescindible" obtener la tarjeta municipal ciudadana (TMC) para poder hacer uso del mismo. Una tarjeta que puede adquirirse de forma gratuita en las oficinas de atención ciudadana y que permite, mediante un lector, poder abrir el 'container' para depositar la basura orgánica, además de facilitar el control de las personas que lo utilizan y del número que hacen uso del mismo. Además de por medio de la tarjeta física, el ciudadano puede abrir la cerradura electrónica a través de su móvil, dándose de alta en la aplicación de 'Ireki' con la TMC, ya que también funciona mediante un código QR.

Presentación del nuevo modelo de recogida de residuos orgánicos Alex Larretxi

El concejal de Planificación y Gestión Ambiental, César Fernández de Landa, ha presentado este miércoles el nuevo modelo de recogida de residuos orgánicos en la ciudad que dispondrá de 873 nuevos contenedores electrónicos que se sumarán a los 444 buzones de recogida neumática. El barrio de Lakua será el primero en estrenarse a partir del 14 de octubre, para, posteriormente, extenderse a El Pilar, centro de la ciudad y estar totalmente operativo en todas las zonas para la primavera del próximo año 2023.

Para informar de su uso, el Consistorio realizará campañas informativas con un stand itinerante en el mismo barrio, a 15 días vista de su implantación, y paralelamente también en el centro de la ciudad. Además, se colocarán carteles en los portales de vecinos y se distribuirán trípticos con toda la información que también está disponible en la página web municipal.

Registro de usuarios

El acceso electrónico permitirá en un futuro la creación de un registro de usuarios que servirá para "valorar la bonificación" de la tasa de basuras en función del número de personas empadronadas en el domicilio y "el número de servicios" que hacen del contenedor. La tarjeta municipal ciudadana es personal y sin ella no se podrá hacer uso del contenedor orgánico.

El objetivo del Ayuntamiento es establecer "rebajas fiscales" para incentivar el reciclaje entre la ciudadanía, bajo la premisa de "quien más genera, más paga". El gobierno municipal ya ha presentado una propuesta al respecto y se mantiene a la espera de su aceptación por parte de la oposición municipal. Aún así, Fernández de Landa ha aclarado que "no se pondrá en marcha durante 2023", ya que todavía "queda mucha labor por hacer". "Primero hay que implantar el nuevo sistema en la ciudad y luego modificar la ordenanza que regula las basuras", ha añadido.

Por tanto, la medida no se debatirá este año dentro del calendario de ordenanzas fiscales y, aunque el gobierno ve "buena disposición" por parte de la oposición municipal, no se abordará durante esta legislatura. "Hay que analizar cómo se diseña la bonificación, en qué cantidad y en base a qué se aplica".

¿Qué se deposita en el contenedor de recogida orgánica?

Muchos de los residuos que hasta ahora los ciudadanos depositan en los depósitos de resto deberán ser separados para introducirlos en el nuevo contenedor de color marrón. De primeras, la basura orgánica debe ir siempre metida en bolsas compostables para garantizar un residuo orgánico de calidad y evitar contaminaciones del plástico.

Exclusivamente, se desecharán restos de comida y jardinería, papel de cocina y servilletas sucias, posos y filtros de café, restos y bolsitas de infusiones y tapones de corcho. Estos son los residuos que se aprovecharán para generar abono de calidad y compost para cerrar el ciclo de la fracción orgánica.

Otros desechos como la suciedad y el polvo que se barre en los hogares, las colillas de tabaco, excrementos de animales o los pañales de bebés se deben introducir al depósito de resto, ya que no son materias orgánicas. Uno de los responsables de la campaña informativa del Ayuntamiento aconseja seguir el siguiente principio: "Si tienes dudas, tíralo al resto".

Recogida neumática

La implantación de este nuevo sistema de recogida de la fracción orgánica va a acarrear una "profunda transformación" de todo el sistema en la capital alavesa, ya que se van "a reconstruir" todas las islas de recogida en la ciudad. Tal y como ha explicado el jefe de la unidad de gestión de residuos, Joseba Sánchez, cambiará el uso del actual modelo de recogida neumática.

Actualmente, este tipo de contenedor recoge residuos de resto y orgánicos y "se adaptará para poder acoger la basura orgánica mediante el acceso electrónico", así como para recibir las bolsas de envase. Es un cambio que obedece a facilitar el reciclaje, ya que los buzones de recogida neumática "están más cerca de los domicilios" y, principalmente, "el plástico es el residuo que más se genera" en los hogares.

Cuando llegue este cambio, la recogida neumática se circunscribirá a la basura orgánica y de envases y plástico y las islas de reciclaje se utilizarán para el contenedor de resto, el 'container' azul para papel y cartón y el verde para depositar el vidrio.

El nuevo sistema también tendrá cambios en el casco histórico que ahora funciona mediante la implantación temporal de contenedores de reciclaje. Esto cambiará y el Ayuntamiento establecerá "islas permanentes" de contenedores para la basura orgánica selectiva, papel, cartón y vidrio; mientras que la recogida neumática se encargará de recibir los desechos de resto y envases. Y es que el actual sistema de aspiración de recogida neumática permite diferenciar las bolsas de envases de las del resto por su peso.