Las cuentas de la Seguridad Social presentaron un saldo negativo a 31 de mayo de 1.022 millones de euros, un 48% por debajo los 1.970 millones del mismo periodo del año pasado, en un contexto de subida de los ingresos por cotizaciones.

Según los datos facilitados por el Ministerio de Inclusión, esta cifra se obtiene de la diferencia entre unos ingresos (derechos reconocidos por operaciones no financieras) de 73.556 millones, que muestran un incremento del 9,2%, y unos gastos (obligaciones reconocidas) de 74.578 millones, que crecen en un 7,6% interanual.

Al detalle de los ingresos, las cotizaciones sociales a la Seguridad Social continuaron aumentando con un incremento del 9,7% interanual hasta los 62.977 millones.

De esta forma, destaca la Seguridad Social, los ingresos por cotizaciones siguen en máximos históricos en términos absolutos y también registran el mayor incremento en los últimos 16 años en el acumulado de los cinco primeros meses del año.

Del lado de los gastos, la mayor partida, 64.262 millones, corresponde a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 8,7%.