El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha considerado un error que desde el Gobierno español se trate de culpar de la elevada inflación a las grandes empresas, que son "las que crean riqueza en este país".

En declaraciones a RNE, Garamendi ha asegurado que "se están buscando culpables donde no los hay" y se ha mostrado contrario a la intención del Gobierno español de gravar los beneficios extraordinarios logrados por la banca y las energéticas que facturen más de 1.000 millones anuales en los ejercicios 2022 y 2023.

Impuestos a la banca y las eléctricas

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dijo ayer durante el debate sobre el estado de la nación que la subida de los precios de consumo y de los tipos de interés no puede servir para que las grandes empresas acumulen más riqueza, un argumento que el líder de la patronal interpreta en clave electoralista.

Garamendi ha recordado que los tipos de interés ni siquiera han subido aún y que estos dos impuestos van a dañar la confianza inversora que suele buscar "estabilidad regulatoria".

Sostiene que el Estado está recaudando más

A su juicio, va a ser difícil que el sector energético se embarque en proyectos de largo plazo que requieren mucha inversión, como los vinculados a la transición verde, si se ve penalizado vía impuestos.

Ha recordado que el Estado también está recaudando más como consecuencia de la elevada inflación y que si el Gobierno pretende fomentar un pacto de rentas nacional, también tendrá que aportar algo vía eficiencia de la administración o a través de un menor gasto en la revalorización de las pensiones y de los salarios del sector público.