El País Vasco ha llegado marzo de este año con un superávit de 319 millones de euros, el equivalente al 0,41 % de su Producto Interior Bruto, cuando en el mismo periodo de 2021 registró un déficit de 9 millones, el 0,01 % de su PIB.

Las comunidades autónomas lograron cerrar marzo con un superávit de 220 millones (0,02 % del PIB), lejos del déficit de 2021, gracias tanto a la buena marcha de los ingresos como a las mayores transferencias recibidas del Estado, entre las que se incluyen las correspondientes al cambio del sistema de IVA en 2017, según los datos de ejecución presupuestaria publicados este lunes por el Ministerio de Hacienda.

Y solo cinco comunidades autónomas registraron déficit en el primer trimestre: Baleares, Castilla-La Mancha, Cataluña, Murcia y Valencia.

En equivalencia al PIB, el mayor superávit hasta marzo fue el de Navarra, con el 0,89 por ciento de su Producto Interior Bruto, seguida del 0,58 de Asturias y el 0,41 de País Vasco, La Rioja y Cantabria.

El déficit del conjunto de las administraciones públicas, salvo las entidades locales, ascendió en el primer trimestre a 4.633 millones de euros, una cifra un 77,8 % inferior a la del mismo periodo de 2021 y que equivale al 0,35 % del PIB.

Según los datos de ejecución presupuestaria publicados este lunes por el Ministerio de Hacienda, esta corrección del déficit se ha producido gracias a un fuerte incremento de los ingresos, del 11,6 %; así como a una reducción de los gastos, del 2,7 %.

Entre los ingresos destacó la recaudación tributaria, que repuntó un 17,1 %; mientras que entre los gastos aumentaron los consumos intermedios, los intereses de la deuda y la inversión.

En el primer trimestre, la administración central registró un déficit de 3.746 millones de euros, un 75,5 % menos y un 0,29 % del PIB, ante el fuerte crecimiento de los ingresos, sobre todo los impuestos, y la reducción de los gastos, debido a que el año pasado computaban los avales del ICO.