- A las cuatro y media de la madrugada de ayer viernes, Jon Cruz partía desde Bilbao junto a tres compañeros de profesión hacia Madrid. A título individual y sin siglas de por medio, recalcan, los cuatro llegaron bien temprano a la capital española para participar en la manifestación de transportistas convocada por la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte, convocante de la huelga a nivel estatal.

En un receso en el viaje de vuelta a Bilbao, Cruz atendía a este periódico poco antes de que la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, se reuniera por primera vez con los portavoces de la Plataforma. El hecho de que el Gobierno sentara en la mesa a los convocantes de la huelga había generado ciertas ilusiones entre los manifestantes, aunque los transportistas vascos mantiene su propia hoja de ruta.

“Hay que esperar a ver qué pasa, pero desde luego lo que ha ofrecido el Gobierno hasta ahora es muy insuficiente. La gente necesita trabajar, pero después de dos semanas de huelga hay que conseguir algo decente”, señalaba Cruz. Autónomo, este transportista trabaja para una empresa, a la que solicita que cumpla el acuerdo de diciembre para cubrir las subidas del diésel. Según denuncia, son muchas las empresas que se están negando a aplicar este factor corrector en los pagos a sus transportistas.

En Euskadi el sindicato Hiru decidirá en asamblea extraordinaria mañana domingo si continúa respaldando la huelga convocada por la Plataforma a nivel estatal. Tanto Hiru como la agrupación de transportistas del Puerto de Bilbao han indicado esta semana que podrían mantener los paros al margen de cómo se desarrollen las negociaciones en Madrid, si bien parece que la Plataforma estatal ha encontrado eco entre los trabajadores y que sus movimientos condicionarán en un sentido u en otro lo que pase en Euskadi.

“Hemos demostrado que no somos una minoría como decían. Somos la muestra del descontento y el enfado que hay en el sector”, indicaba el transportista vizcaíno. “Lo importante ahora es, pese a la euforia, conseguir que la huelga haya servido para algo”.