Lanbide acreditará a partir de ahora el cumplimiento de los requisitos para acceder al Ingreso Mínimo Vital (IMV) sustituyendo en esta labor a los ayuntamientos vascos, lo que "simplificará las gestiones de las personas demandantes y facilitará el trabajo de los servicios sociales municipales".
La vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, ha remitido una carta al presidente de Eudel, Gorka Urtaran, en el que indica que el acuerdo alcanzado entre Lanbide y el Instituto Nacional de la Seguridad Social establece que la acreditación del IMV se realizará desde el Servicio Público de Empleo hasta que se culmine la transferencia íntegra a Euskadi de este ingreso.
Según el Real Decreto por el que se establece el IMV, el certificado acreditativo debe ser expedido por los servicios sociales competentes en materia de empadronamiento, residencia, convivientes o situación de exclusión social.
"Sin embargo, la situación específica de Euskadi nos ha llevado a valorar y negociar una propuesta alternativa para articular esta gestión" ha explicado Mendia, quien ha recordado que en esta comunidad Lanbide es la que se encarga de la Renta de Garantía de Ingresos y que también tiene acceso directo a información relativa a cuestiones como empadronamiento o residencia.
Por lo tanto, dadas las competencias, experiencias y medios con los que cuenta Lanbide para la gestión de la RGI este organismo dispone de la capacidad requerida para acreditar el cumplimiento del acceso al IMV, afirma en una nota Mendia, quien también indica que se va a facilitar y simplificar a la ciudadanía el proceso para solicitar este ingreso.
