La economía vasca saldrá con fuerza del bache generado por la pandemia. Tras una caída del Producto Interior Bruto de casi un 10% el año pasado, cambiará la inercia este curso con un crecimiento del 6,7% y avanzará un 6,4% el próximo, siete décimas más de lo previsto inicialmente.

La suma de ambas (13,1%) permitirán mirar a través del retrovisor el desplome de la crisis. Y en lo que respecta al paro, la tasa de desempleo vasca se situará en el 9,5% en 2022, tres décimas menos que en 2019. De modo que se cerrará el ciclo del covid con una rápida recuperación, con la deseada forma de V.

El Gobierno vasco ha revisado sus previsiones económicas esta mañana. Tras introducir en la calculadora los últimos indicativos, mantiene la estimación de 2021, pero eleva la de 2022 tras constatar la "vigorosa" reacción de todos los sectores. Así lo ha trasladado esta mañana el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, en los micrófonos de Radio Euskadi. Según sus cálculos, desde el punto de vista económico, la CAV volverá a mediados del año que viene al nivel prepandemia.

En el nuevo cuadro macroeconómico destaca el ritmo de crecimiento de la industria (9,7%), que recupera el papel de locomotora de la economía vasca. De cara al año que viene, los servicios serán los que más crezcan (6,8%), pero el sector manufacturero mantendrá el tono con un repunte del 5,6%. Por su parte, la construcción crecerá más de un 4% este año y el próximo.