La campa de Mercedes Benz en Vitoria acumula decenas de unidades de furgonetas, en su mayoría eléctricas, a la espera de poder darles salida.

El motivo, la falta de piezas, principalmente semiconductores, aunque según señalan fuentes de la fábrica también empiezan a faltar otro tipo de piezas necesarias para completar la producción de los vehículos.

El pasado mes de marzo, la incertidumbre que afecta al mercado mundial para el abastecimiento de un material como los semiconductores ya golpeó a la factoría de Mercedes Benz en la capital alavesa, que por segunda ocasión ese mes tuvo que cancelar la jornada de producción.

Los problemas por la falta de semiconductores son comunes a diversos sectores, y dentro de la automoción la propia Volkswagen en Navarra también tuvo su campa rebosante de coches el mes pasado por la crisis de los chips.