Un juzgado de Vitoria ha declarado nulo el despido de un trabajador de Celsa Atlantic, la antigua Laminaciones Arregui, al considerar que no está fundamentado en razones "objetivas", según ha informado ELA en un comunicado, en el que ha explicado que la empresa deberá abonar una indemnización de 7.000 euros por daños morales al trabajador despedido.
La sentencia se refiere al caso de uno de los ocho trabajadores despedidos en febrero del año pasado por la empresa. La decisión del Juzgado de lo Social, ha añadido ELA, "vuelve a hacer justicia en una lucha histórica y que no ha cesado".
El sindicato ha afirmado que la plantilla de la antigua Laminaciones Arregui "sigue teniendo que hacer frente a las medidas de una empresa que aplica políticas antisindicales y vengativas para con quien se organiza para defender los derechos de los trabajadores".
"VENGANZA"
ELA ha asegurado que la sentencia deja claro que los responsables de la empresa "siguen queriendo vengarse de quien se moviliza" ya que subraya que las decisiones de este tipo siempre "recaen sobre el mismo colectivo", formado por "trabajadores beligerantes en defensa de sus derechos".
El sindicado, que ha explicado que el juzgado condena a Laminaciones Arregui a abonar una indemnización de 7.000 euros por daños morales al trabajador despedido, ha asegurado que la sentencia establece que la empresa "sigue intentando por todas las vías posibles seguir con el plan que diseñó para castigar a la parte de la plantilla que luchaba por sus derechos".
Además, según añade ELA, la resolución judicial constata que "la situación económica e industrial de la empresa no ofrece variaciones sustanciales en el tiempo", por lo que los motivos para el despido "no se fundamentan en criterios objetivos, sino de persecución sindical".
La organización sindical ha felicitado a la plantilla de Laminaciones Arregui por su "intachable lucha", y ha expresado su confianza en que "se haga justicia de la misma manera con el resto de compañeros despedidos".