- La transformación energética en pos de un mundo descarbonizado y cada día más electrificado mediante la generación a través de energías renovables como la eólica o la solar es imparable y la industria ligada a esta actividad va a ser una de las palancas de crecimiento económico en el mundo en los próximos 20 años. Las compañías vascas cuentan con tecnología de primer nivel para tener una oportunidad de desarrollo en dicho mercado a nivel mundial. Este es el caso de la empresa vasca de ingeniería Saitec Offshore Technologies que tras cinco años de desarrollo y otra serie de prueba ha puesto en marcha la plataforma flotante SATH (acrónimo de Swinging Around Twin Hull) como base para instalar aerogeneradores marinos en aguas profundas. La plataforma ha sido desarrollada por Saitec Offshore Technologies y, según el ingeniero Luis González- Pinto, el director de proyectos de la compañía, el prototipo experimental que se va a poner en marcha en la costa vasca, en las instalaciones de Bimep, puede abrir grandes posibilidades de crecimiento a la empresa de Leioa pues el mercado eólico mundial marino va a aumentar de forma importante en los próximos años. "Creo que este sector, como todo el de las energías renovables, es estratégico para el País Vasco", resalta Luis González-Pinto.
¿Qué tipo de compañía es Saitec?
— Saitec es una empresa de ingeniería vasca, -de carácter familiar pues fue puesta en marcha en 1988 por dos socios, provenientes de Sener e Idom-, muy ligada a las infraestructuras, en concreto al desarrollo de proyectos de infraestructuras de transporte (ferrocarriles, carreteras), ingeniería del agua, arquitectura, urbanismo, medio ambiente, industria y energía. Y su ámbito de actuación se extiende a toda la cadena de valor de la ingeniería. En Saitec siempre ha habido una decidida apuesta por el I+D como vía para abrir nuevas oportunidades de negocio. Así, hace unos años en la compañía, que hoy cuenta con unas 300 personas y presencia en una decena de países incluidos Suecia, Japón o Australia, se vió que había una posibilidad de negocio en el desarrollo de la energía eólica marina y se creó en 2016 una spin-off, Saitec Offshore Technologies, que es la que está detrás, en colaboración con RWE, de este proyecto de plataforma flotante SATH que se va a probar en aguas vascas
¿Qué objetivos persigue la empresa con su innovadora plataforma?
— Con la plataforma SATH, nuestra compañía busca entrar en el mercado mundial de la energía eólica offshore en emplazamientos de más 30 metros de profundidad en adelante, donde se prevé que esta solución sea plenamente competitiva gracias a sus bajos costes de construcción e instalación. De hecho, en Saitec esperamos que SATH permita reducir los costes incluso frente a las instalaciones de eólica fija offshore como las que ya existen en el Mar del Norte y en el Báltico
¿Qué características tiene la tecnología que desarrollan?
—Destaca entre ellas el uso de hormigón prefabricado, lo que posibilita una construcción modular — fácilmente escalable— a la vez que impulsa el empleo de materiales y técnicas de la industria local, a diferencia de otras soluciones, que requieren técnicas avanzadas de construcción en otro material como el acero que es el que se usa en otras alternativas. Además nuestra plataforma está diseñada con un calado máximo de unos 10 metros lo que permite utilizar casi todos los puertos del mundo y creemos que esta es una ventaja en costes más que facilita su implantación en prácticamente todos los sitios.
¿La puesta en marcha en aguas del País Vasco de una de las primeras plataformas flotante offshore del mundo qué objetivo persigue?
— El primero validar el comportamiento de nuestra tecnología en el proyecto DemoSATH, que plantea la instalación de una turbina de 2 Mw en BIMEP, el área de ensayos en mar abierto de Euskadi. Todo ello permitirá introducir las mejoras necesarias y alcanzar la madurez adecuada para una futura explotación comercial de esta tecnología.
¿Qué calendario contempla?
—Tras el acuerdo con BIMEP, sociedad dependiente del Gobierno Vasco, nuestra iniciativa, un proyecto conjunto Saitec y RWE, pasa por testar a partir de 2021 un prototipo piloto de plataforma flotante para turbinas eólicas en el mar que comenzará a funcionar en otoño de 2021. La idea, reitero, es reducir los costes de los parques eólicos en el mar en aguas profundas y de su gestión.
¿Cómo es la DemoSATH ?
—Es una plataforma como si fuera un barco, un catamarán, construido en hormigón y compuesta por dos cascos unidos a un único punto con un rodamiento lo que permite a la plataforma girar alrededor de este punto. Y al ser como un barco ella misma se alinea con el viento al tener un solo punto de anclaje que gira.
¿Qué dimensiones va a tener?
—La plataforma cuenta con una estructura semisumergible de hormigón pretensado y con un único punto de amarre, con el que se consigue reducir los costes de construcción y mantenimiento. La base de la estructura será de unos 30 metros de ancho y 64 metros de largo. La plataforma, incluida la turbina, será remolcada a su punto de amarre a 3 kilómetros de la costa cantábrica vasca en el que el mar tiene 85 metros de profundidad.
Este proyecto es para una turbina de 2 Mw pero en el mar se van a instalar aerogeneradores mucho más grandes. ¿Es escalable?
—Sí, sin problemas. Es verdad que los aerogeneradores marinos ya son de unos 10 Mw y en los futuros contratos serán de hasta 15 Mw pero nuestro sistema está pensado para hacer frente a esas nuevas escalas. De hecho, una plataforma flotante para turbinas de esas dimensiones sería como el terreno de juego de un campo de fútbol, como San Mamés, por ejemplo.
¿Por qué es tan importante el desarrollo de las plataformas eólicas flotantes?
—Porque el futuro de la energía eólica pasa por el mar. Primero porque el viento como recurso para generar energía en el mar es más abundante y aprovechable que en tierra, y además en la costa disminuye el impacto visual de los aerogeneradores, y porque la madurez de la tecnología flotante permitirá al País Vasco posicionarse en el primer nivel del sector de la energía eólica marina al superar uno de los principales inconvenientes técnicos de la península: la estrechez de su plataforma continental. Esto hace que, a partir de reducidas distancias de la costa, las profundidades marinas sean muy elevadas (el 92% de las áreas marinas en España hasta una distancia de 24 millas náuticas se encuentran a profundidades superiores a los 50 metros). La tecnología eólica flotante permitirá la instalación de aerogeneradores en emplazamientos más alejados de la costa que antes eran técnica y económicamente inviables y que son la gran mayoría en el mundo. De hecho vemos importantes posibilidades de desarrollo en países como Japón o Corea, por ejemplo, donde el viento es menos importante que en Mar del Norte, área que pos sus bondades para la eólica marina que es una excepción en el mundo.
¿El País Vasco tiene nivel tecnológico en eólica marina, en particular, y en energías renovables, en general?
—Sí. Sin duda. Viajas por todo el mundo y no dejas de ver empresas vascas trabajando con tecnologías punteras en toda la cadena de valor de las energías renovables, incluida la eólica marina flotante. Lo que no tiene mucho sentido es que el País Vasco que tiene una industria energética renovable de primer nivel tenga tan poca generación renovable instalada. Es una verdadera pena porque tenemos grandes capacidades. El País Vasco tiene mucho futuro en las energías renovables, en general, y en las eólicas marinas, incluida la flotante, en particular. Además, somos gente más seria que nadie y somos plenamente competitivos. Esta deber ser una apuesta estratégica de País porque tiene futuro y porque tenemos la tecnología.
¿Qué potencial de crecimiento tiene la eólica marina flotante?.
—Muy alto. En Francia, el año que viene primer se va a poner en marcha un proyecto comercial de 250 Mw. Las perspectivas mundiales de nuevas instalaciones de generación eólica flotante para 2030 serían de unos 5 GW pero esta tecnología se acelerará en 2030-2040 y despegará de forma masiva porque la descarbonización es imparable. Se verá que con nuestra tecnología en países como Japón o Corea, u otros, con menos recurso eólico que el Mar del Norte, la generación marina es competitiva en costes.
"La industria vasca está presente en toda la cadena de valor de la generación eólica y cuenta con tecnología competitiva"
"La generación eléctrica mediante plataformas eólicas marinas flotantes crecerá mucho en el mundo. Habrá unos 5 GW en 2020"