El Plan PIVE 2 de ayudas a la compra ha sido muy bien recibido por las principales patronales de automoción y por los propios consumidores que podrán disfrutar de ayudas de al menos 2.000 euros para cambiar su vehículo por otro más eficiente. La plataforma de vehículos en la red AutoScout24, que mueve uno de cada tres vehículos vendidos en España, respalda este programa de incentivos pero advierte de que no es oro todo lo que reluce.
Lo cierto es que muchos concesionarios y compraventas se han visto pillados con un stock sobrante de vehículos de ocasión que finalmente no entraron en el último plan ayudas. En el intervalo entre el PIVE 1 y el PIVE 2, estos profesionales confiaron demasiado en que los usados de un año se beneficiarían de la ampliación e hicieron aprovisionamiento de seminuevos para los próximos meses. Finalmente, no fue así.
Este movimiento comercial y ciertamente previsor que realizaron muchos vendedores ahora se ha convertido en un sobrestock que es necesario liberar e incluso priorizar frente al vehículo nuevo para evitar su depreciación y sobrecostes financieros. Por todos es bien sabido que un vehículo ya matriculado se deja parte de su valor cada día que pasa, lo que genera también al final pérdidas para el profesional.
Así, el Plan PIVE, que fue concebido para impulsar la venta de coches nuevos, está generando en sus inicios el efecto contrario: la venta forzada de vehículos de ocasión. Así, las operaciones de usados crecieron en Navarra y el País Vasco un 26,1% y 18,5%, respectivamente, hasta febrero, según datos de Ganvam.
Asimismo, este programa ha generado otro efecto perverso, esta vez sobre el importe medio de los vehículos de ocasión que, contra todo pronóstico, marcaron su nivel más bajo en los últimos cuatro años. Y es que los concesionarios y compraventas están rebajando los precios de sus VO para hacerlos más competitivos frente al vehículo nuevo y así garantizar esa salida más rápida a su stock.
Sólo en el País Vasco los precios cayeron un 4,3% hasta febrero, situándose en una media de 12.775 euros, unos 400 euros por encima de la media nacional donde también retrocedieron un 2,2%. La Comunidad Foral de Navarra marcó la excepción en esta radiografía de precios con una subida del 1,1%, hasta los 13.365 euros, uno de los precios más altos de todo el Estado.
AutoScout24 recuerda cómo en el Plan PIVE 2, el vehículo usado parte de una clara posición de desventaja frente al nuevo que está incentivado con unas ayudas de al menos 2.000 euros, a los que hay que sumar las promociones y descuentos históricos de más de 3.000 euros que vienen acumulando marcas y distribuidores para animar las ventas.
Con estos precios, el kilómetro cero, que tradicionalmente se vendía en torno a un 20% más bajo que uno nuevo, ha perdido su principal atractivo frente al nuevo: su bajo precio; algo que, sin duda, es necesario recuperar si se quiere impulsar su venta y evitar su depreciación a marchas forzadas. De ahí que los precios del VO hayan marcado su nivel más bajo de los últimos cuatro años.
Estos movimientos comerciales al compás de la oferta y la demanda si algo evidencian es que ambos mercados están, lo queramos o no, indefectiblemente unidos. No se puede pensar que los precios históricos que estamos viviendo en el mercado de nuevos no afectarán al mercado de ocasión, como tampoco parece lógico excluir de las ayudas a los usados que hoy por hoy se han convertido en el verdadero coche del pueblo por su buen precio y garantía.