Madrid. La actividad turística española cerró 2011 con un crecimiento del 2,6%, casi cuatro veces más que el conjunto de la economía española (estimado en el 0,7%), según informó la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur), que advirtió de que este crecimiento está todavía lejos de poder anticipar una clara recuperación.

El presidente de Exceltur, Sebastián Escarrer, subrayó en la presentación de las previsiones del sector para 2012, que el repunte de los dos últimos años solo ha servido para recuperar parte de la intensa pérdida de actividad del inicio de la crisis. "El turismo se ha convertido en el principal y único motor de la economía española que ha permitido la generación de 2.678 millones de euros y la creación neta de 17.000 puestos de trabajo a lo largo del año", explicó Escarrer. El lobby turístico subrayó que la demanda extranjera ha impulsado en exclusiva el crecimiento del PIB turístico durante 2011, mientras se aprecia una contracción de la demanda española que se ha ido acelerando a medida que ha avanzado el año.

La demanda extranjera se ha favorecido de un escenario macroeconómico más propicio hasta después del verano, pero sobre todo, por los turistas que han optado por España ante la inestabilidad presente en Egipto y Túnez (que han perdido siete millones de visitantes).

Exceltur indica que el consumo turístico de los españoles se ha contraído en 2011, muy condicionado por la pérdida de poder adquisitivo de las familias españolas. Así, la demanda extranjera es "en exclusiva" la que ha contribuido al crecimiento del sector este año. El incremento de la actividad turística ha permitido que el 64,1% de las empresas turísticas españolas hayan incrementado sus ventas en 2011, aunque esto no se haya trasladado en la misma intensidad sobre los resultados de las empresas turísticas españolas, ya que solo el 44,9 ha mejorado beneficios.

De cara a 2012, Exceltur prevé el devenir de la actividad turística estará vinculado a la evolución de la crisis de los mercados y su eventual impacto en los países del área euro y al ritmo de retorno a la normalidad de los destinos competidores del norte de Africa.

Así, según sus estimaciones, la actividad turística en España mantendrá niveles similares a los registrados en 2011 con una leve previsión de crecimiento de entorno al 0,2%. El ritmo será muy débil. Ante esta situación, Escarrer, instó a Mariano Rajoy a "liderar" y poner en marcha cuanto antes el Plan Integral de Turismo prometido en su discurso de investidura para conseguir que el sector turístico sea el motor de recuperación económica de España.