Vitoria. Por momentos fue, probablemente, una de las noticias del año en Álava, pero nada más lejos de la realidad. El futuro de los 80 trabajadores amenazados con el despido de Saunier Duval continúa pendiendo de un hilo. El pasado lunes, en el marco de una nueva reunión entre la dirección y su comité de empresa, la compañía anunció por sorpresa la retirada temporal del ERE de extinción para 80 de sus trabajadores con el fin de volver a presentarlo "en breve" al amparo de la reforma laboral aprobada ayer por el Gobierno. Según ha podido saber este diario la intención es volver a presentarlo antes del viernes. Las ventajas económicas y estructurales que devienen de esta reforma, "más favorable al tipo de circunstancias que sufre en estos momentos Vaillant", aseguró ayer un portavoz de la empresa, ha llevado finalmente a Saunier a dar el paso para obtener una situación más provechosa de la presentación del ERE. El enfoque de Saunier, sin embargo, es otro. La compañía reconoce que las condiciones, ahora, son más favorables, pero también advierte de que continúa siendo "absolutamente necesario" negociar un plan social con los trabajadores. Los intentos que se han producido hasta ahora han caído en saco roto. "En los dos meses que llevamos hablando de este tema no ha habido ningún progreso. La empresa ha facilitado toda la información que el comité ha pedido, pero éste se niega a abordar el plan social. Creemos que es generoso y queremos negociarlo, pero hace falta un poco de voluntad por su parte", insisten las mismas fuentes. Ante la gravedad de la situación, el comité de empresa hará hoy una lectura crítica de la decisión tomada por la compañía.
