madrid. Políticos y agentes económicos y sociales se mostraron escépticos con el anteproyecto de ley de Economía Sostenible por la falta de concreción en las medidas que contiene.
Para el presidente del PP, Mariano Rajoy, la nueva ley es la consecuencia de "una cadena de anuncios" que nunca terminan y una medida que "sólo empeora las cosas". Recordó ayer, con ironía, que Zapatero, ya anunció la ley en mayo "y tuvo un gran éxito, consiguió titulares y grandes portadas, pero nadie sabía lo que era. Hoy tampoco".
Más escéptico se mostró el coordinador general de IU, Cayo Lara, quien la calificó de "humo" y puso "en cuarentena" el anteproyecto puesto que los Presupuestos Generales para 2010 no incluyen partidas económicas que la respalden.
El portavoz de economía de CiU, Josep Sánchez-Llibre, afirmó que la norma del Gobierno es un "acto de desprecio" hacia el Parlamento y una "burla", ya que conforma un compendio de "propaganda".
Desde el sindicato UGT, su secretario general, Cándido Méndez, pidió que la nueva norma sea "muy beligerante" en la lucha contra el fraude fiscal y la explotación laboral. El líder sindical enfatizó que "economía sostenible y nuevo modelo productivo" significan "reforzar" la industria y el cambio tecnológico, algo que, brilla por su "gran ausencia" en el actual anteproyecto. El planteamiento de CCOO es similar ya que considera que en la ley propuesta por el Gobierno no se reflejan "suficientemente" los temas referidos a la calidad en el empleo y a que exista un auténtico marco industrial. Para USO la futura norma tiene "más ruido que contenido y es una huida hacia adelante".
Por su parte el presidente de la patronal tecnológica AETIC, Jesús Banegas, opinó que el contenido del anteproyecto no compensa la reducción en I+D+i. A su vez, los Técnicos de Hacienda (Gestha) lamentaron que el anteproyecto no incluya medidas concretas contra el fraude.