La cuenta atrás para el inicio de una nueva campaña para el Lautada Urpolo ya ha comenzado. En poco más de dos semanas, el conjunto gasteiztarra, único equipo de waterpolo de la provincia, arrancará la competición “con mucho optimismo”, tal y como asegura Ramón Alzola, secretario del club.

Los cerca de 100 deportistas del Lautada Urpolo afrontan la recta final de la pretemporada con “muchas ganas e ilusión”.

El club vitoriano contará este curso con un equipo de veteranos, seis equipos federados, dos en categoría sénior –uno masculino y otro femenino–, un juvenil masculino, un cadete masculino y un infantil mixto, además de otros conjuntos no federados para las categorías de alevín y benjamín.

Cerca de un centenar de deportistas forman parte esta temporada del club gasteiztarra, el único club de waterpolo de Álava

Estos tomarán parte en la Liga Escolar de Gipuzkoa, tras un acuerdo entre las dos Diputaciones, la alavesa y la guipuzcoana, para que los pequeños waterpolistas del Lautada Urpolo “puedan foguearse, disputar algunos partidos y divertirse antes de que que llegue el momento de la competición”, apunta Alzola.

Un grupo de jóvenes jugadores del Lautada, durante un entrenamiento

Un grupo de jóvenes jugadores del Lautada, durante un entrenamiento DNA

Y es que los equipos de categoría escolar, al no estar federados aún, no forman parte de ninguna liga y se limitan a disputar jornadas escolares contra otros equipos de alevines y benjamines de Gipuzkoa.

Bajo la supervisión de Pedro Biart

Los que sí que compiten en la Liga Federada del País Vasco son los otros seis equipos del Lautada Urpolo. Todos ellos, junto a los más pequeños, están desde el año 2012 bajo la supervisión de un entrenador de prestigio como es el cubano Pedro Biart.

El técnico caribeño, olímpico en Barcelona’92 con la selección de Cuba de la que fue capitán, entrenador en su día del CN Martiánez en la Liga de División de Honor, seleccionador de México y jugador de clubes históricos como la Barceloneta, ejerce de director deportivo del Lautada Urpolo.

Pedro Biart, capitán de la selección de Cuba en los Juegos de Barcelona’92 , ejerce de director deportivo desde el año 2012

Bajo su supervisión, los equipos federados del cuadro gasteiztarra esperan realizar de nuevo una notable temporada en la Liga Federada del País Vasco. En esta competición, el Lautada Urpolo se mide a equipos de Bizkaia, Gipuzkoa y también de Navarra, La Rioja y a uno cántabro.

El cubano Pedro Biart supervisa uno de los entrenamientos del Lautada Urpolo en Mendizorroza DNA

Los clubes de estas tres comunidades han sido invitados a la Liga Vasca al no haber un número suficiente de equipos en sus respectivas autonomías y así poder formar parte de una Liga de mayor entidad.

El Lautada Urpolo afronta con “mucha ilusión” su concurso en las diferentes categorías. En infantil masculino, el club gasteiztarra rozó el pasado ejercicio el ascenso hasta la última jornada. Sin embargo, esta temporada, al ser todos los jugadores de primer año, será más complicado rendir a tan buen nivel y “les tocará sufrir”, como desvela Alzola.

Ilusión con el cadete y juvenil

Por su parte, en el club esperan que el equipo cadete y juvenil masculino “hagan un buen papel”. No en vano, estos dos conjuntos cuentan con jugadores curtidos y con experiencia y hay depositadas grandes esperanzas en ellos para pelear por las primeras plazas.

Una entrenadora da instrucciones a los jugadores del Lautada Urpolo en la piscina de Mendizorroza DNA

No en vano, en estos últimos años el trabajo de Pedro Biart ha dado sus frutos y ha logrado sacar una buena camada. “Son jugadores que están muy implicados, van a entrenar muy contentos, trabajan bien y tienen calidad”, se felicita Alzola.

De hecho, algunos de ellos han dado ya el salto incluso al equipo sénior. Jóvenes promesas con los que, al menos, aspirar a lo máximo en el conjunto masculino sénior.

“Tenemos jugadores implicados que vienen a entrenar contentos, trabajan muy bien y, sobre todo, tienen calidad”

Ramón Alzola - Secretario del Lautada Urpolo

Y es que este curso el femenino cuenta con una plantilla muy renovada y el objetivo “es acoplar a las nuevas jugadoras”. “Con las chicas lo que pasa es que una vez que llegan a la edad de ir a la Universidad buscan un equipo en el que entrenar donde van a realizar sus estudios y dejan el club, por lo que hay que echar mano de las categorías inferiores”, aclara Alzola.

Jugadores del Lautada Urpolo, durante un entrenamiento DNA

Este problema no lo tiene el sénior masculino. Un bloque, el de este año, que cuenta con la experiencia de jugadores de temporadas precedentes y la savia fresca de algunos de los canteranos de más calidad que han dado el salto al primer equipo.

Con esta mezcla de juventud y veteranía, el objetivo del Lautada Urpolo es ambicioso. “Vamos a buscar posiciones de ascenso para subir a Primera División”. A lo grande. Un reto mayúsculo para el Lautada Urpolo.