El Aurrera de Vitoria ELMA consiguió su billete para la Segunda División B la pasada temporada tras siete años en el purgatorio de la Tercera. Con la pretemporada ya superada, el conjunto vitoriano afina los últimos detalles antes de su estreno, este sábado a las 18.00 horas en Zabalgana, contra el Entrerríos Zaragoza.

Iván Mulas, técnico rojillo, comparte sus sensaciones con este periódico a pocas horas del debut en una categoría que requerirá grandes dosis de oficio.

“Mis sensaciones son positivas, el equipo está con muchas ganas y preparado para el reto que nos viene”, comenta el técnico de los rojillos, que liderará al equipo junto a Edu García, formando ambos un novedoso dúo en el banquillo cargado de ilusión.

Tres bajas y otros tantos fichajes

El Aurrera mantiene el bloque del pasado curso a pesar de las bajas de Asier Divar, Ander Tobalina y Aritz Sáez de Ugarte. Sin embargo, el equipo ha reforzado sus filas con las incorporaciones de Miguel Pangua, Iñaki Segurola y Ander González, quienes aportarán frescura y calidad en posiciones clave.

El cuerpo técnico ha trabajado intensamente durante la pretemporada, combinando aspectos físicos y tácticos, con el objetivo de mantener el buen rendimiento de la pasada campaña. “Parto de que soy nuevo, me he adaptado a los jugadores y después ellos a mí. Ha ido bastante bien y ha sido sencillo porque el bloque es el mismo. Es mucho más fácil introducir nuevos detalles y mantener las consignas que dieron resultados el año pasado”, explica el entrenador rojillo.

Mulas asegura que el Aurrera se ha enfocado durante las últimas semanas en alcanzar el nivel óptimo tanto físico como táctico para llegar en las mejores condiciones al primer partido. “El objetivo de la pretemporada no puede ir más allá de ganar el primer partido. Los tres puntos valen igual en la primera jornada que en un partido de marzo”, subraya.

El desafío de la 2ªB

Consciente del reto que supone competir en una categoría más exigente ante rivales con mayor potencial económico, Mulas ve la oportunidad como un paso importante tanto para el club como para el fútbol alavés. “Es hora de que un proyecto se afiance en esta categoría. Lo merecemos y tenemos el nivel para estar aquí. Es una liga muy profesionalizada y competir en ella será un desafío”, recuerda.

Mulas tiene claro qué espera de su equipo y cuáles deben ser sus señas de identidad: “Quiero que seamos aguerridos, que peleemos cada balón y que nos ayudemos como compañeros. El dinero compra calidad, pero el esfuerzo no se compra, y en eso tenemos que ser los mejores”.

El primer rival del Aurrera, el Entrerríos Zaragoza, es un equipo joven y combativo, filial de un equipo de Segunda División. “Tienen mucha garra y manejan muy bien la estrategia en ataque. Nuestro objetivo será reducir su capacidad goleadora y buscar un partido de pocos goles”, concluye Mulas, confiado en el trabajo hecho durante la pretemporada.