Síguenos en redes sociales:

La Copa del Rey: un cuadro por completar

las copas 2019-20 el derbi de la cartuja terminará de cerrar la nómina de campeones del torneo del ko en europa, donde las finales se celebraron hace casi un año

La Copa del Rey: un cuadro por completar

Casi un año después de la fecha inicialmente prevista para el partido, la final de la Copa del Rey entre Real y Athletic tendrá lugar el próximo sábado en Sevilla. Los motivos del retraso resultan de sobra conocidos por todos. La pandemia del coronavirus por un lado y la voluntad de celebrar el encuentro con público por otro provocaron en su día el aplazamiento. La situación, asumida desde hace tiempo por estos lares, contrasta, sin embargo, con la vivida al mismo respecto en el resto de potencias futbolísticas europeas. Inglaterra, Alemania, Italia, Francia€ ¿Qué sucedió allí en el curso 2019-20 con los torneos coperos? Un repaso a los acontecimientos en el continente convierte al derbi de La Cartuja en la excepción que confirma la regla, hasta el punto de que txuri-urdin o rojiblancos terminarán de completar un cuadro de honor en el que aguardan Arsenal, Nápoles, Bayern de Múnich y PSG.

El fútbol alemán caminó por delante del resto cuando la fase más aguda de la crisis sanitaria comenzó a quedar atrás, en plena primavera de 2020. El 16 de mayo, un mes más temprano que los demás torneos, se reanudó la Bundesliga. Volvió así un calendario germano que solo se vio trastocado por el hecho de desarrollarse en fechas más tardías, pero que conservó su estructura original. Intercaló entre dos jornadas del campeonato las semifinales de la DFB Pokal (la copa alemana), que estaban aún pendientes (allí se disputan a partido único). Y reservó para el fin de semana posterior a la conclusión de la propia Bundesliga la final del torneo del KO El 4 de julio, el Estadio Olímpico de Berlín, con las gradas desiertas, albergó el duelo entre el Bayern de Múnich y el Bayer Leverkusen, saldado con triunfo bávaro (4-2). Lewandoski disponían ya de un 3-0 en el minuto 60, por lo que el partido no tuvo mucha historia.

Algo muy similar, aunque un mes más tarde, sucedió en Inglaterra con motivo de la FA Cup. La Premier League se reanudó el 17 de junio. Y el calendario de competiciones siguió su formato original. La propia FA Cup tenía pendiente aún la disputa de sus cuartos de final, y fue avanzando en su desarrollo hasta celebrarse la final de Wembley justo después de la última jornada del campeonato. Como en Alemania. Siguiendo con las similitudes, en tierras británicas también se mantuvo el escenario habitual del duelo por el título. Y un Wembley completamente vacío asistió al derbi londinense en el que Arsenal y Chelsea pugnaron por levantar el trofeo. Se adelantaron los blues gracias a un gol de Pulisic, pero dos dianas de Aubameyang sirvieron para remontar al cuadro dirigido por el entrenador donostiarra Mikel Arteta.

Con la Coppa Italia comienzan ya las diferencias en la gestión de los torneos del KO en Europa. Y es que en el país transalpino se optó por celebrar la propia copa a modo de reapertura futbolística tras el confinamiento primaveral. Cuando todo se detuvo a comienzos de marzo, la competición había celebrado ya los partidos de ida de las semifinales, quedando pendientes los de vuelta. Y fueron precisamente estos los que implicaron el regreso a la actividad en junio, concretamente los días 12 (Juventus-Milan) y 13 (Nápoles-Inter). Menos de una semana después, el miércoles 17, se disputaba la gran final en el Olímpico de Roma, a puerta cerrada. Nápoles y Juventus empataron sin goles en los 120 minutos de juego, y el título correspondió al propio conjunto napolitano, más acertado en la decisiva tanda de penaltis. Después, el lunes 22 de junio, con la Coppa Italia ya solventada, la Serie A se reanudó para dirimir las trece jornadas que tenía aún pendientes.

El de Francia es un caso diametralmente opuesto al de los sucedido aquí con la Copa del Rey. Durante el período más severo de la pandemia, las autoridades galas acordaron suspender la liga y renunciar a recuperar las diez jornadas pendientes. ¿Y la Coupe de France? Para comprender la celebración de la final cabe acudir a la paralela copa de la liga gala y a la situación de un club grande como el Olympique Lyonnais. Séptimo clasificado y por lo tanto excluido de las competiciones europeas 2020-21 (la tabla en el momento de la suspensión se dio por buena a efectos de billetes continentales), su presidente Jean Michel Aulas, un directivo muy influyente en Francia, presionó para que la final de la citada copa de la liga (PSG-Lyon) sí terminara disputándose, agarrándose a la misma como al único clavo ardiendo que podía llevarle a la UEFA de este curso. Finalmente sus reclamaciones surtieron efecto, lo que indirectamente llevó a que la final de la Coupe de France (PSG-Saint-Étienne) también se celebrara. Este partido tuvo lugar el 24 de julio en el gigantesco Saint-Dénis con la testimonial presencia de 2.800 espectadores, y lo ganaron los parisinos (1-0) con gol de Neymar. Una semana después se jugó el PSG-Lyon de la copa de la liga, que levantó el propio PSG tras imponerse en la tanda de penaltis. Aulas y los suyos se quedaron sin sellar el pasaporte europeo.

Y conectamos aquí con la Copa del Rey 2019-20, precisamente para explicar el efecto que tendrá el partido de La Cartuja en las competiciones continentales: un efecto absolutamente nulo. Cuando hace poco menos de un año se acordó aplazar al presente curso la disputa de la final, Real y Athletic renunciaron a los privilegios europeos que otorga la competición del KO. Lo agradeció sobremanera el Granada, séptimo en la Liga y clasificado así para una Europa League en la que todavía sigue vivo. Mientras, los txuri-urdin, sextos en el torneo doméstico gracias a un postrero gol de Januzaj en la última jornada, respiraron especialmente cuando comprobaron que su concesión copera no tenía consecuencias. Y a quien peor le salió la jugada fue al Athletic. No consiguió el pasaporte continental a través de la tabla liguera y ahí terminaron todas sus opciones de acudir a Europa, una vez retrasada una final de Copa que podía abrirle las puertas de la UEFA en caso de victoria ante la Real. De cara a las competiciones europeas de la próxima campaña, la final vasca de La Cartuja no computa ya. Solo lo hace el Barcelona-Athletic del 17 de abril.

Cuando emergió la crisis sanitaria, la copa alemana tenía pendientes aún sus semifinales y su final. Como es tradición en el país germano, el duelo decisivo se celebró una semana después de la conclusión de la Bundesliga, en el Estadio Olímpico de Berlín. El recinto, sin público en las gradas, albergó el 4 de julio el duelo entre el Bayern de Múnich y el Bayer Leverkusen, con triunfo para los bávaros (4-2), quienes semanas más tarde se proclamarían campeones de Europa.

La FA Cup no faltó a su cita con Wembley pese a la pandemia. Una vez que concluyó la Premier League el pasado verano, Arsenal y Chelsea se jugaron el título el 1 de agosto, en un atractivo derbi londinense. Se adelantaron los blues por mediación del estadounidense Pulisic, pero dos goles de Aubameyang sirvieron para remontar a los entrenados por Mikel Arteta. La final se disputó sin público, debido a las restricciones motivadas por la crisis del coronavirus.

En el país transalpino utilizaron la Coppa como avanzadilla para el regreso del fútbol, después del confinamiento primaveral. Cuando todo se detuvo, a la Serie A aún le restaban trece jornadas por celebrarse, pero antes se cerró el torneo del KO., que tenía pendientes los partidos de vuelta de las semifinales y la final. En esta, el 17 de junio, el Nápoles superó a la Juventus en una decisiva tanda de penaltis, después que los 120 minutos de juego, incluida la prórroga, se saldaran sin goles en un desierto Estadio Olímpico de Roma.

En el país galo sucedió todo lo contrario a lo ocurrido aquí con la Liga y con la Copa del Rey. Las autoridades francesas acordaron suspender el torneo de la regularidad, y sin embargo autorizaron la celebración de dos finales, la de la copa y la de la copa de la liga. En la primera de ellas, el PSG se impuso por la mínima al Sant-Étienne (1-0) en el estadio de Saint-Dénis. Este encuentro se jugó el 24 de julio y en las gradas del recinto pudieron darse cita 2.800 espectadores (como se aprecia en la imagen).

El caso completamente opuesto es el de Francia,

donde en verano se disputó la final de copa habiéndose suspendido toda la liga

El aplazamiento de la final al presente curso implicó la renuncia de Real y Athletic a la plaza europea que el torneo otorga a su campeón