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Saransk - Islandia afronta su última oportunidad de prolongar su estancia en Rusia 2018 ante la líder del grupo, Croacia, ya clasificada y con la mente puesta en los octavos de final.
El papel en un debut mundialista puede prolongarse para el conjunto islandés, pendiente del devenir del otro choque del cuarteto, el que enfrenta a Nigeria y a Argentina en San Petersburgo.
El cuadro de Heimir Hallgrimsson sumó su primer punto en un Mundial en el choque contra el equipo argentino, en la primera jornada, pero cayó en el siguiente, superado por Nigeria.
Islandia pretende prolongar el idilio con la alta competición que consiguió en la pasada Eurocopa, donde llegó hasta los cuartos de final. Antes de eso, Hallgrimsson debe sacar adelante la cita con Croacia. Confía el combinado islandés aprovechar la relajación de su rival, ya clasificado, y sin objetivo claro sobre el campo.
Curiosamente, Islandia terminó por delante de Croacia en la fase de clasificación para este torneo. De hecho, el último duelo entre ambos terminó con la victoria islandesa con un gol en el último minuto.
La selección de Croacia afronta el partido como un premio para sus futbolistas, con los deberes hechos y como juez del desenlace definitivo del grupo. Insiste el equipo balcánico en subrayar la profesionalidad de su plantel, que no pretende regalar nada al adversario y, por tanto, crear daños a terceros.
Aún así, Zlatko Dalic ya ha anunciado que no pondrá todo su potencial sobre el terreno de juego. De hecho, pretende no contar con la mayoría de los futbolistas que acumulan una tarjeta de los partidos anteriores para evitar contratiempo alguno en las eliminatorias. De la misma forma, Dalic puede dar descanso a Luka Modric. El centrocampista del Real Madrid es una de las sensaciones del Mundial. - Efe
