VITTEL - La quinta etapa de esta edición del Tour de Francia será el primer contacto con la alta montaña, una etapa en la que se espera que los favoritos para llegar a París vestidos de amarillo empiecen a marcar diferencias. La prueba que este mediodía dará el escopetazo de salida en Vittel, recorrerá un total de 106,5 kilómetros hasta llegar a la cima de la Planche des Belles Filles. Son casi seis kilómetros de subida, con una pendiente media del 8,5% pero con porcentajes que pueden llegar, en su parte final, al 20%, por lo que se espera que la etapa de hoy marque un momento importante en el Tour. Es un examen más temprano de lo habitual, con ascensos de gran calibre tan solo cinco días después del estreno en Düsseldorf. Según Xabier Artetxe, miembro del equipo de preparadores del conjunto Sky, será un recorrido que dejará en evidencia el estado de forma en el que llegan los favoritos: “A aquellos que estén mal se les caerá la máscara.

Será la tercera vez en la que una etapa de la Grande Boucle suba la ya mítica pese a su juventud Planche des Belles Filles, y ambas citas fueron decisivas en sus respectivas ediciones. Primero, en la edición de 2012, la gran cima desveló el talento de un Chris Froome que entonces era gregario de su compatriota Bradley Wiggins, que acabaría coronándose como campeón frente al Arco del Triunfo y posteriormente, en 2014 fue el siciliano Vincenzo Nibali quien inscribió su nombre en la cima antes de hacerlo como campeón del Tour, completando así su colección de grandes vueltas, puesto que ya había sido campeón tanto en la Vuelta como en el Giro.

Es de esperar que durante la tarde de hoy el vigente campeón Chris Froome trate de lanzar un ataque como viene haciendo en las anteriores ediciones, en las que ha aprovechado las primeras citas con la alta montaña para dar un golpe en la mesa. Este año está ilusionado con este nuevo ascenso a la Planche des Belles según declaró el ciclista de origen keniata: “Estoy deseando que llegue la etapa, especialmente teniendo en cuenta que tengo muy buenos recuerdos desde que gané en 2012. También porque es el primer final en alto y espero que la carrera se estabilice en la lucha por la general”. Por otra parte, se mostró atento con respecto a los posibles ataques de sus rivales: “Porte tiene que compensar el tiempo perdido, lo mismo que el resto de rivales de la general, así que podemos esperar una carrera muy agresiva una vez que lleguemos a la montaña”.

Por su parte, el director del BMC, Yvon Levanois, ante un posible ataque del británico, declaró que sería algo que tienen en mente: “Es una forma de actuar inteligente, pero ya nos lo sabemos, no nos pillará de sorpresa. Aunque Froome gane unos segundos, no vamos a cambiar nuestro planteamiento”. Alberto Contador, que en 2014 tuvo que abandonar la etapa por una caída antes de las rampas de la Planche des Belles Filles, es también de los que tienen en mente un posible ataque de Froome: “Tiene un equipo potentísimo y le gusta hacer diferencias en la primera etapa de montaña”.

Acabando con los favoritos, el colombiano Nairo Quintana, que ahora mismo se sitúa a 48 segundos de la cabeza de carrera y a 36 del jefe de filas del Sky, vería con buenos ojos el llegar con los gallos de la competición, y no tiene en mente atacar: “Lo interesante es no perder tiempo”. Eusebio Unzue, el director del equipo Movistar, dio especial importancia a estar en la cabeza de la etapa: “Hay que tratar de estar delante, y eso no sería poco, pero no renunciamos a nada. Por el tipo de etapa y el final que tiene nos damos por satisfechos con estar con los mejores”.