Vitoria - El guerrero reposó ayer junto a los suyos en Vitoria y hará lo propio hasta el viernes por la tarde, cuando partirá a Gijón en busca de su quinto campeonato de España, una gesta solo al alcance de un par de ciclistas (David Seco y José Luis Tamalillo, ambos con seis entorchados) que Ruiz de Larrinaga, Larri, se propone conquistar en su mejor momento de forma y con una incalculable dosis de optimismo derivada de sus triunfos en Torrelavega, Puente Viesgo, Izarra y Ormaiztegi.

Perdone la pregunta pero siendo el día que es resulta cuando menos apropiada. ¿Los Reyes se han portado bien con usted?

-No me puedo quejar, la verdad, pero no soy mucho de esas historias aunque en esta ocasión les he pedido poder ganar el domingo en Gijón pero eso no sé si va a depender de los Reyes... Y para el resto de temporada, pues que salga todo lo mejor posible, que tenga salud y que las lesiones me respeten.

¿Este año hasta cuándo tiene pensado alargar la temporada?

-Al contrario que en otras campañas, esta vez la vamos a largar un poco más, unas tres semanas más. Terminaré con el Mundial en la República Checa en febrero y alargaremos todo hasta finales debido fundamentalmente a que el calendario deportivo en Bélgica continuaba y a que hemos creado una infraestructura mayor en el equipo. Tengo más facilidades y a las marcas y patrocinadores también les interesa, así que correré carreras allí con los mejores del mundo, una decisión que creo que me beneficia porque me permite ganar en experiencia y competitividad.

En este epílogo de temporada, ¿qué balance hace de lo que lleva disputado?

-Es evidente que siempre es todo mejorable pero creo que este año está siendo mi mejor temporada. La pasada ya dije que había sido una de mis mejores pero este año es seguro. Hemos decidido tomar parte en todas las pruebas de la Copa del Mundo (se llevan disputadas cinco de las seis que forman esta cita) y he logrado meterme entre los 25 primeros en dos de ellas en Bélgica, lo que para mí es casi un triunfo porque nunca antes había logrado unos puestos así y, sobre todo, cada vez estoy más cerca de los primeros espadas. Además hemos conseguido el Campeonato de Euskadi en Izarra y llegar con opciones al próximo campeonato de España de Gijón, que se celebrará el próximo domingo.

Hay cuerda para rato...

-Me noto bien, creo que sí hay cuerda y, desde luego, margen de mejora, pero aunque tengo 35 años creo que físicamente me encuentro mejor que nunca. En el ciclocrós la edad no es tanto impedimento o desventaja como en el ciclismo en ruta, por ejemplo, ni el físico es lo más importante. Hay otras variables como la técnica que coges en el manejo de la bici y la adaptación a determinados circuitos y, especialmente, la experiencia que adquieres con los años. En mi caso el hecho de estar compitiendo en el extranjero es algo que me está ayudando mucho.

El pasado domingo se impuso con autoridad en Ormaiztegi después de una carrera llena de incidentes y donde de nuevo compitió hasta el final con su, en estos momentos, máximo rival, Aitor Hernández. ¿Qué sensaciones tiene días después?

-Sensaciones muy buenas, la verdad. Llevo las últimas tres semanas compitiendo a un muy buen nivel y en lo psicológico, que es muy importante, estoy también fuerte porque las victorias ayudan, claro. Pero todo esto hay que tomárselo con mucha calma y no venirte arriba porque las euforias en este tipo de situaciones no suelen ser buenas.

Le guste o no parte usted como favorito el domingo en el campeonato de España de Gijón, la prueba más importante del calendario. ¿Cómo la afronta?

-Como acabo de decir, con mucha tranquilidad, humildad y respeto por los rivales, que seguro que van a achuchar mucho. De todos ellos, está claro que Aitor (Hernández) va a ser el máximo rival pero tampoco hay que olvidarse de José Antonio Hermida, un excampeón del Mundo de mountain bike que estando al 80% seguro que dará guerra, o de Ismael Esteban.

¿El circuito del parque de Los Pericones le beneficia o todo lo contrario?

-Lo más importante para mí en estos momentos es llegar a Gijón muy descansado, por eso ayer descansé y en los días posteriores la carga de trabajo será mínima. A partir de ahí, las referencias que tengo del circuito son de hace tres o cuatro años, en una Copa de España que disputé allí mismo, y por lo que intuyo y me interesa sería bueno una carrera dura que incluso tuviese barro o frío, condiciones en las que me muevo bien. Pero eso, de momento, son solo suposiciones, así que lo mejor es estar tranquilo y no obsesionarse mucho con el tema.

¿Le incomoda la presión de favorito con la que se va a presentar en el Estatal del próximo domingo?

-Eso del cartel de favorito y esas cosas pienso que tiene dos lecturas: una mala que te moleste y no seas capaz de aguantar, y otra buena que provoque una autoestima interesante porque estás muy bien y sobre todo porque la gente se fija en ti, te da como favorito y te tiene en cuenta. Es curioso que este año es el que más se me está valorando de todos los que llevo al máximo nivel... Espero estar a la altura y que esa presión del favorito no me haga fallar. Sería algo muy bonito poder lograr el quinto campeonato de España, algo que de momento solo han superado con seis entorchados Seco y Talamillo.

Visto lo visto, ¿la temporada está discurriendo según lo había planeado?

-Sí, sin duda. El año pasado la planteamos de manera similar pero no llegaban las victorias. Esta vez hemos alargado un poco la competición y estamos evolucionando igual de bien, de menos a mal, con la diferencia de que en diciembre sí estamos recogiendo triunfos importantes como los de Torrelavega, Puente Viesgo, Izarra -donde logró el campeonato de Euskadi- y Ormaiztegi.

¿Y después de la cita de Gijón..?

-Haré una carrera del calendario vasco antes de la Copa del Mundo de Holanda el próximo 25 de enero y el Mundial en la República Checa el 1 de febrero. Colarme en ambas pruebas entre los 25 primeros sería fantástico.