madrid - El corredor de montaña Kilian Jornet estableció un nuevo récord de velocidad de subida y bajada al Aconcagua, de 6.962 metros de altura, al marcar un tiempo de 12 horas y 49 minutos y después de un intento fallido el pasado viernes, cuando se vio obligado a dar media vuelta cerca de los 6.500 metros debido al mal tiempo, con ráfagas de viento de más de 90 km/h.
En cambio, el lunes la meteorología le fue favorable y el atleta pudo completar el ascenso y el descenso al pico más alto de América, un recorrido de ida y vuelta por la vía normal que suma 59,85 km con un desnivel positivo de 3.962 metros, aunque el mayor reto era la altitud.
“Hemos pasado casi dos semanas en la zona, pero probablemente habríamos necesitado más para estar en las mejores condiciones. El Aconcagua no es una cima técnica como otras que hemos tenido que superar durante el proyecto, pero sí que, hasta ahora, ha sido la más alta”, apuntó Jornet.
El catalán salió de la caseta de guarda parques de Horcones (2.900 m) a las 6 de la mañana y recorrió 23 km y 1.400 m de desnivel en 3 horas y 15 minutos antes de llegar a Plaza de Mulas (4.300 m), campo base del Aconcagua. Tras detenerse cuarto de hora para hidratarse, subió hacia Nido de Cóndores (5.550 m), donde pasaba después de cinco horas de la salida, iniciando entonces el último tramo hasta llegar a la cima, aunque antes, había que superar 1.463 m de desnivel positivo y, especialmente, pasar la barrera de los 6.500 metros.
“A partir de esa altura, he empezado a ver que me estaba afectando. Tenía problemas de equilibrio y resbalaba constantemente con la nieve helada. Por eso he decidido avanzar poco a poco, sabiendo que todavía tenía mucho camino por delante”, señaló Jornet.
A la Cueva del Guananco, cerca de los 6.600 metros, el atleta marcaba siete horas y 40 minutos, y casi una hora después lograba hacer cima (8.45 horas). Tras un descanso de 15 minutos, afrontó la bajada donde la altura le siguió “afectando hasta Plaza de Mulas”, lo que le provocó pérdidas de “equilibrio”, por lo que en el campo base, al que llegó pasadas las diez horas, paró 20 minutos.
Jornet, con su tiempo de 12 horas y 49 minutos, superó todos los récords e inscribe su nombre como el hombre más rápido en completar el recorrido. - E.P.