Madrid/Barcelona. Atlético de Madrid y Barcelona disputan esta tarde el partido, hasta ahora, más transcendental de la temporada. Igualados a 49 puntos y con el liderato en juego, al que aspira el equipo rojiblanco, desafía al conjunto azulgrana, Messi y el orden de la Liga. El Barcelona no se ha movido de la cima de la tabla en toda la temporada pasada ni en las 18 jornadas disputadas de la actual. El Atlético, por su parte, no manda en la Liga desde hace más de tres años, y el partido supone una prueba de fuego para ambos equipos. Sobre todo para el conjunto madrileño, que, en su irrenunciable discurso del partido a partido, representa esta temporada una alternativa al rotundo dominio en la liga, durante los últimos nueve años, de Barcelona y Real Madrid, con seis y tres campeonatos respectivamente.
Atlético y Barcelona siguen caminos prácticamente paralelos en esta Liga. Sólo han perdido cinco de los 54 puntos disputados, han cedido únicamente una derrota y un empate en las 18 jornadas de la competición y sólo cinco goles de diferencia les separan en la tabla. Por delante, 90 minutos para definir el campeón de invierno y con el estadio Vicente Calderón, que llenará sus gradas, como escenario donde no ha perdido el Atlético en esta campaña, con trece victorias en todas las competiciones y un empate (1-1), precisamente logrado por el Barça en la Supercopa de España. El último en ganar allí también fue el club catalán, el 12 de mayo de 2013 (1-2).
El Atlético encadena casi cuatro años sin vencer al Barcelona, desde el 14 de febrero de 2010, cuando se impuso por 2-1 en el Manzanares, una racha contra la que también luchará este sábado el equipo rojiblanco, en el que Simeone, su entrenador, saldrá con su once ideal, tras las rotaciones que incluyó el martes en Valencia. Diego Costa, su máximo artillero, aunque probablemente tenga más responsabilidades defensivas y estará más retrasado cuando su rival tenga la pelota, tratará de no perder su racha goleadora. Juanfran Torres, lateral derecho del equipo, podrá jugar después de que el Comité de Competición le haya quitado la tarjeta amarilla recibida ante el Málaga. Enfrente estará el mejor Barcelona de la temporada, con todos sus efectivos, incluido el argentino Leo Messi que, después de dos meses de baja, regresó en el partido copero ante el Getafe y lo hizo destilando las mejores sensaciones y dos goles.
Con cinco jugadores para tres puestos, la elección será complicada para el técnico del Barça. La clave de la alineación está en la presencia o no de Cesc Fabregas, un jugador en gran estado de forma, pero que normalmente ocupa la plaza que deja el argentino. Martino dificilmente prescindirá de Neymar en un partido de este calibre, así que Pedro o Alexis se jugarán una plaza.