Madrid. Bélgica y Rusia, dos selecciones que vuelven al Mundial tras lograr la clasificación de forma brillante, son los claros favoritos del Grupo H, en el que Corea y Argelia parten como víctimas.

Los diablos rojos viven un momento de esplendor con jugadores de primer nivel y doce años después de su última comparecencia en el Mundial de Corea y Japón están dispuestos a dar la campanada en Brasil. Bélgica cuenta con una excelente generación de jóvenes futbolistas que son protagonistas en las principales ligas europeas, como el portero del Atlético de Madrid, Thibaut Courtois, de 21 años, los centrocampistas del Chelsea, Eden Hazard y Kevin De Bruyne, ambos de 22, o del delantero del Everton Romelu Lukaku, de 20, aparte del cerebro del Manchester United, Marouane Fellaini.

Rusia, pese a que también bordó la fase de clasificación en la que se impuso a Portugal, ha cambiado a las órdenes de Capello, con Alexandr Kokorin (Dinamo), de 22 años, como estandarte, bien arropado por otras nuevas estrellas como Glushakov (Spartak), Fayzulin (Zenit) o Samédov (Lokomotiv), sin olvidar a ilustres veteranos como Kerzhakov y Shirókov o el portero Akinféev.