londres. La selección española de balonmano masculino tratará de certificar hoy su presencia en cuartos con un triunfo sobre Hungría, en un encuentro para el que es duda el lateral Eduardo Gurbindo, aquejado de una contractura en el abductor medio de la pierna derecha.

El conjunto español se aseguraría un puesto entre los ocho mejores equipos del torneo olímpico en el caso de empatar con el equipo magiar, aunque sólo la victoria le aseguraría evitar la cuarta plaza del grupo, que condenaría a enfrentarse con la todopoderosa Francia en cuartos.

Para ello, España volverá a apelar a su solvente defensa y a una portería en la que podrá contar con un Sterbik a pleno rendimiento, tras superar las dolencias en el gemelo.

Por el contrario, el seleccionador español no sabrá hasta última hora la disponibilidad del navarro Eduardo Gurbindo, que tuvo que retirarse antes de los diez minutos de juego del choque ante los surcoreanos, tras sufrir una contractura en el abductor medio de la pierna derecha cuando intentaba fintar a un rival.

Una baja que dejaría a Maqueda, como único lateral derecho ante Hungría, en la que jugará un Nagy que hace apenas unos meses se daba por seguro que actuaría en Londres con el conjunto español.

El seleccionador nacional dijo sobre su rival de hoy: "Es un gran equipo, con una defensa muy fuerte, ayudada por unos porteros que están parando mucho, y luego en ataque tiene mucha calidad con la presencia de Csaszar y Leka, además de mucho lanzamiento, que se ha visto reforzado con la presencia de Nagy".