Duración: 37:49 minutos de juego; 10:43 minutos de tiempo real.
Sets: 8-10; 2-10; 8-10.
Saques: 1 de Luján y 1 de Fusto.
Faltas de saque: 4 de Luján y 2 de Fusto.
Pelotazos: 238 pelotazos a buena.
Tantos en juego: 10 de Luján y 13 de Fusto.
Errores: 10 de Luján y 7 de Fusto.
Incidencias: Unas 200 personas en el frontón Bizkaia de Miribilla para presenciar la final del Mundial Individual.
Bilbao. Corría Pablo Fusto como un relámpago sobre la cancha del frontón Bizkaia. Anclado el argentino en un físico envidiable, trabajado al máximo para el presente Mundial Individual, deslumbró ante un Wladimir Luján que sufrió los envites de un vendaval, el del bonaerense, cruel y calculado. "Ha salido el partido que llevaba toda la semana esperando. Ha salido el partido que me ha quitado el sueño", relataba el delantero americano, quien vio que sus artes veloces, rapidísimas, encuadradas en la quinta marcha de un motor Ferrari, explotaron como un trueno sobre el zaguero cubano. No fue el día de Luján, pero no porque estuviera muy desdibujado, sino que Fusto estuvo a un nivel tan impresionante y mandón que el habanero no pudo exhibir su machete de zurda. Esperaba la fuerza de la naturaleza cubana no errar en la final como lo hizo en el primer enfrentamiento de semifinales, iba a tratar de lanzarse de manera descarnada al remate, pero sus anhelos murieron cuando Fusto emergió, como un huracán, moviéndose a velocidad impresionante, golpeando con el alma y, sobre todo, recuperando la posición como una exhalación. Ahí residieron gran parte de las opciones de Pablo, que se engalanó hasta el final entre los cuadros alegres, rematando la contienda con un dos paredes endiablado. Después cayó de rodillas al suelo y gritó. El bonaerense se coronaba de nuevo como dominador del Mundial Individual, como hizo en 2009 frente al armintzarra Esteban Gaubeka.
Fue un martillo el bonaerense desde el principio. A pesar de contar con la rémora del saque -su primer servicio se quedó corto-, Pablo tenía el día. Además, en el primer juego, Luján aún no había encontrado su juego. Dos faltas de saque del cubano mecieron al argentino, que empaló a la perfección en un ejercicio de poder con el golpe por encima del hombro, con el que descoyuntó a su contrincante. Con eso y con el ritmo; Pablo alargó los tantos, peloteando, endureciendo la contienda, hasta que cayó la primera manga. Y después la segunda, rápida como una centella, cayó otra vez para su bolsillo pero esta vez con un sonoro 2-10, cimentado en un poderoso ataque del argentino, que continuó con la buena línea que llevaba en el primer set de la final del campeonato.
Lejos de achantarse, Luján acometió la tercera manga muy guerrero, sacando el machete a pasear. Tanto empeño tuvo sus frutos y puso contra las cuerdas a Fusto. No obstante, la buena senda del argentino se tradujo otra vez en la concreción del set, del partido y de la txapela. Aun así, Wladi puso la incertidumbre encontrando sus mejores momentos del envite en este último tramo, pero, asediado por el relámpago y el trueno que era Fusto, cayó no sin oponer resistencia. Sin embargo fue demasiado para el cubano, superado en todas las facetas del juego.
Ibargarai, tercero Xabier Ibargarai, sorpresa del presente Mundial Individual al entrar a semifinales tras tumbar al coco Esteban Gaubeka, quedó tercero de la competición al tumbar ayer en el frontón Bizkaia a Josu Urkijo en un asfixiante duelo. Dilucidado en cinco juegos (7-10, 10-9, 10-7, 6-10 y 10-9), el zaguero de Erratzu se las vio y se las deseó para acabar con el delantero zallarra, muy duro, que aprovechó al máximo sus posibilidades.
El vizcaino trató de tumbar a su contrincante llevándole a la batalla a los cuadros alegres, pero su treta no terminó de cuajar ante un rival en buena forma. Así, en un último juego de bella factura, con el empate a nueve, fue el sacrificado palista navarro el que alcanzó el triunfo y la tercera posición.