Vitoria. Los líderes de la ACB mantuvieron una jornada más su frenético ritmo y sumaron sendos plácidos triunfos. El Real Madrid consiguió una clara victoria en Fuenlabrada, donde se puso arriba en el marcador desde el principio. Aunque los locales intentaron reaccionar, poco pudieron hacer ante el acierto blanco liderado por cuatro jugadores con 10 ó más puntos. En el Palau Blaugrana, el Barcelona aplastó sin miramientos al Murcia pese a que Xavi Pascual reservó para la ocasión a Mickeal y un Navarro recién recuperado de la fascitis plantar que sufrió en el Iradier Arena.
Los otros representantes vascos también sumaron con cierta facilidad. El Gescrap Bizkaia arrolló desde el inicio al Lucentum Alicante en un choque en el que el conjunto bilbaíno apenas dio opciones a un rival mermado por las lesiones y más que desacertado en el tiro. El conjunto dirigido por Fotis Katsikaris sumó su cuarta victoria consecutiva, la tres anteriores a domicilio, de la mano de D'or Fischer (14 puntos, 5 tapones y 24 de valoración), clave de salida, y un trabajo defensivo ante el que solo respondió el forastero dominando el rebote. Por su parte, el Blusens Monbus sumó ante el Lagun Aro en el Fontes do Sar su sexta derrota consecutiva (80-88) tras haber peleado por el partido en los últimos minutos a pesar de haberse visto con 17 tantos de desventaja en el minuto 29.
El Joventut consiguió ante el Manresa su segunda victoria consecutiva (92-79) por primera vez en esta temporada, en un encuentro marcado por un pésimo arbitraje -Salva Maldonado fue expulsado en el minuto 13- que se decidió tras el descanso gracias a la majestuosa actuación de Latavious Williams. Por último, el Blancos de Rueda Valladolid mantiene el rumbo fijo hacia el descenso tras un partido que dominó sin problemas (58-73) el CAI Zaragoza y sin necesidad de desplegar su mejor juego, ya que con los rebotes y su tino en el tiro exterior se aseguraron el control ante la ineficacia local.