BARCELONA Valdés; Alves, Piqué (Abidal, m.9), Puyol, Maxwell, Thiago, Xavi, Iniesta (Keita, m.71), Pedro (Adriano, m.73), Messi y Villa.

RACING Toño; Francis, Álvaro, Bernardo, Christian, Diop (Torrejón, m.83), Tziolis (Edu Bedia, m.55), Adrián, Jairo, Munitis y Koné (Arana, m. 66).

Goles 1-0, m. 11: Messi. 2-0, m.28: Xavi. 3-0, m.68: Messi.

Árbitro Miguel Ángel Ayza Gámez (Comité valenciano). Mostró cartulina amarilla a Diop (m.21) y a Edu Bedia (m.80).

Estadio Asistieron al encuentro 82.225 espectadores en partido correspondiente a la octava jornada de Primera División.

Barcelona. El juego coral del equipo y la genialidad del solista Leo Messi, el mejor jugador del mundo. Con eso se bastó el Barcelona para golear al Racing de Santander (3-0), aumentar a 21 el número de tantos a favor en casa en cuatro partidos y continuar al frente de la clasificación.

Y todo ello en un partido después del parón de selecciones y con el temido virus FIFA en la cabeza de los aficionados y en las piernas de los futbolistas. Leo Messi anotó dos tantos y ya suma diez en el campeonato el día que regresó Andrés Iniesta, después de un mes de baja a causa de una lesión muscular.

Diez minutos y aún no había aparecido. Es más, en ese tiempo su equipo había estado desaparecido, el Racing, contra todo pronóstico, hasta se había acercado más a la meta de Valdés que el Barça a la de Toño y para colmo de males, Gerard Piqué, lesionado, ya había sido sustituido por Abidal. Uno más y había decidido solventar las angustias de los azulgranas. Prácticamente en su primera intervención, en su primera conexión con Iniesta, Leo Messi levantó al público del Camp Nou y marcó un gol de bandera.

Ante una nube de defensas, Leo buscó a Andrés, Iniesta encontró a Messi, Leo se coló entre dos defensas, con una finta sentó a Toño y marcó a puerta vacía (1-0, m.11).

Messi, tras una jugada con Villa, pudo marcar el 2-0 dos minutos más tarde. Y en el minuto 28 Pedro progresó por la banda izquierda y Xavi, sin marca, remató de cabeza desde el área pequeña.

El 2-0 ya fue una losa para los cántabros. El Barça empezó a sentirse más cómodo y empezaron a llegar más ocasiones para los de Guardiola. Pedro, Puyol (que no acertó sin portero y a medio metro de la línea de gol), Villa (tras sortear a Toño) y Messi tuvieron el 3-0 en sus pies antes del descanso frente a un rival absolutamente desbordado.