LEZAMA. "El gol va por rachas y lo importante es que el equipo gane. Me da igual quién meta los goles, pero si tengo ganas de volver a hacerlo", ha manifestado Llorente en la sala de prensa de Lezama antes de admitir que esa sequía ha coincidido con un "pequeño bajón" físico que ha calificado como "normal" a estas alturas de temporada.
Acerca de la visita del domingo a Pamplona, el delantero internacional ha señalado que el Athletic, inmerso en una "bonita pelea por entrar en Europa, "necesita los puntos igual" que Osasuna, un rival "en una situación un poco delicada".
"Va a ser un partido muy disputado. Nuestras opciones pasan por meter un ritmo más alto que ellos y estar fuertes atrás, sin conceder ocasiones fáciles", ha explicado un Llorente que cree que pueden ser fundamentales para el desenlace del partido "las jugadas a balón parado".
También se ha referido el campeón del mundo al previsible ambiente contrario que se va a encontrar el Athletic en el Reyno de Navarra y, especialmente, su compañero Iker Muniain después del revuelo que se originó antes del partido de la primera vuelta por unas declaraciones del joven jugador de la Chantrea.
"Iker ya se sabe defenderse solito. A pesar de ser joven tiene un temperamento importante y no se achica contra nada ni contra nadie. Además, el equipo le va a arropar en todo momento. A ninguno nos va a sorprender el ambiente y menos a Iker. Lleva unos cuantos de estos y lo sabe llevar muy bien", ha reflexionado Llorente.
También Andoni Iraola se ha referido al "intenso" ambiente que habitualmente se encuentran en el estadio pamplonés, quien sin embargo ha confesado que prefiere jugar en estadios con esa atmósfera que "en campos donde no hay espectadores".
Para el lateral derecho, la trascendencia de este encuentro reside principalmente en recuperar el terreno perdido después de la última derrota contra el Real Madrid ante un contrario que "se juega mucho".
"Ya nos pasó en Almería, que si cabe se jugaba más, y conseguimos ganar. De todas formas, Osasuna está bastante mejor y va a ser más complicado. Con Mendilibar presionan más arriba y dejan jugar poco. Tienen muy controladas las dimensiones del campo, van muy bien a las caídas y habrá que estar muy atentos", ha avisado Iraola.
