MURCIA. El mediocampista albaceteño admitió que tienen "muchas ganas de estar allí ya y de que empiece el Mundial", pero que hasta ese momento tienen "sesiones por delante" y que lo importante es que todos lleguen "en muy buenas condiciones" al estreno.
Iniesta, más que preocuparse o fijarse en la plaga de lesiones en otras selecciones, señaló que su única preocupación es presentarse ante Suiza en buena forma para hacer el fútbol e ir cubriendo las etapas durante el Mundial.
Por ello, tampoco le concede apenas importancia a los resultados que se están produciendo en los diversos amistosos y a los 'tropiezos' que han tenido algunas de las aspirantes al título o habituales de las últimas eliminatorias.
"Todos los equipos están preparándose, pueden pasar por momentos mejores o peores, pero cuando realmente hay que estar al cien por cien es a partir del día 16", apostilló.
De tal manera, insistió en que su "única preocupación es llegar en el mejor momento y todos bien, que no haya ningún percance", hacer "las cosas bien y así hasta el día 16".
Iniesta sacó a relucir su lado más humano y solidario en esta rápida visita a Caravaca de la Cruz, donde pudo saludar brevemente al padre de Javier Sánchez Martínez, el niño con parálisis cerebral para el que donó las botas con las que marcó el decisivo gol al Chelsea en las semifinales de la Liga de Campeones 2008/2009.
"Cuando estaba a punto de subir (al salón de plenos del Ayuntamiento de Caravaca) he visto a su padre y le he saludado. Sólo deseo que Javi poco a poco pueda tener mejor calidad de vida", explicó el barcelonista, que aseguró que lo que intenta es aportar su granito de arena "para ayudar a gente que lo necesita".