vitoria. La alpinista guipuzcoana Edurne Pasaban, y el equipo de Al filo de lo imposible han partido de Katmandú (Nepal) hacia el Tíbet para escalar el Shisha Pangma en el Tíbet, la última cima que le falta para coronar los catorce ochomiles del mundo.

Tras haber llegado a la cumbre del Annapurna el pasado fin de semana, la expedición española se ha recuperado durante tres días en la capital de Nepal y Edurne Pasaban se prepara ahora para intentar convertirse en la primera mujer en pisar las catorce montañas más altas del planeta.

El equipo español ha cruzado ya la frontera china, ha superado con éxito los trámites aduaneros y espera llegar muy pronto a la población de Nyalam, en el Tíbet.

Desde allí continuará hacia el campo base chino del Shisha Pangma, en torno a 5.200 metros de altitud, que es el punto donde comenzará la auténtica ascensión del monte, a partir del martes 27 de abril. El Shisha Pangma, con sus 8.027 metros, es el menor de los catorce ochomiles del planeta. Su nombre en tibetano significa Cresta sobre la planicie de hierba. Fue coronado por primera vez en 1964 por el montañero chino Xu Jing, y no volvió a ser ascendido hasta 1980, a causa de la prohibición impuesta por las autoridades chinas.

A principios de marzo el gobierno de China denegó al equipo de Pasaban el permiso para entrar en el Tíbet y subir el Shisha Pangma, como tenía planeado. Esto obligó a cambiar sus planes en un tiempo récord y acometer primero la ascensión al Annapurna, en condiciones invernales y sin ayuda de otras expediciones para abrir las rutas.

La montañera tolosarra afronta con optimismo esta última etapa de su gran reto en el que cuenta como principal rival a la surcoreana Oh Eun Sun, que le ha tomado la delantera y se encuentra muy cerca de coronar el Annapurna, su último ochomil.