buenos aires. El ex delantero del Deportivo Alavés Martín Palermo, de 36 años, se convirtió este lunes en el máximo goleador de la centenaria historia del Boca Juniors, el equipo más popular de Argentina, al superar con 219 tantos la marca que Roberto Cherro mantenía desde 1938 con 218. El gol lo marcó a los nueve minutos del partido contra el Arsenal bonaerense, en el estadio La Bombonera, en la decimocuarta jornada del torneo Clausura.
Palermo, el futbolista que en el tramo final de su carrera aspira a la convocatoria del seleccionador Diego Maradona para participar por primera vez en un Mundial, ha logrado el récord en su novena temporada con el equipo boquense (1997-2000 y 2004-2010). El optimista del gol, mote que desde principios de este milenio debe al entrenador de su mejor momento futbolístico, Carlos Bianchi, es el máximo realizador en activo en su país.
Nada menos que 72 años debió esperar la afición de Boca para que fuera superada la marca del legendario Roberto Cherro, cuyo récord fue logrado al cabo de doce temporadas como figura del equipo (1926-1938). Cherro fue campeón de Liga con el conjunto boquense en cinco ocasiones, medalla de plata con la selección Argentina en los Juegos Olímpicos de Amsterdam"28 y subcampeón mundial en Uruguay"30.
El loco Palermo ganó seis veces la Liga y obtuvo los principales títulos internacionales de clubes a los que se puede aspirar en Sudamérica: una vez la Copa Intercontinental (con dos goles suyos ante el Real Madrid en el año 2000), dos la Libertadores, dos la Sudamericana y tres la Recopa Sudamericana.
Palermo, que llegó a Vitoria en la temporada en la que el equipo albiazul se quedó a las puertas del ascenso a Primera con Pepe Mel en el banquillo, debutó en el fútbol profesional en 1992. Lo hizo con el Estudiantes de La Plata, equipo con el que disputó 90 partidos y marcó 34 goles. En 1998 pasó al Boca Juniors y entre 2000 y 2004 jugó en España. Primero en el Villarreal (21 tantos), luego en el Real Betis (2) y durante media temporada en el Alavés (3), antes de regresar al equipo de la camiseta azul y oro.
Entre los hechos singulares de su carrera destacan el gol que marcó minutos después de romperse los ligamentos de una rodilla en 1999, tras lo cual pidió que le sustituyeran. Ese año, ante el Platense, marcó un gol de penalti dándole al balón con los dos pies a causa de un resbalón. Meses antes falló tres penaltis con la selección argentina de Marcelo Bielsa ante Colombia, en la Copa América de Paraguay. Ahora la meta de este killer pasa por convencer a Maradona para que lo lleve al Mundial.