Será en 2023 cuando 20.000 especies de abejas se convierta en una realidad en la gran pantalla. En ese momento se completará un largo camino que la directora alavesa Estibaliz Urresola está recorriendo con paso firme, además sumando no pocos premios y reconocimientos también internacionales gracias a su trabajo en el cortometraje. Polvo somos y Cuerdas son dos magníficos ejemplos.

El néctar de la diversidad

Patricia López Arnaiz, Ane Gabarain, Itziar Lazkano, Martxelo Rubio, Sara Cozar y Miguel Garcés protagonizan esta película sobre tres generaciones de mujeres y el valor de la diversidad, una historia coral que tiene como eje a Lucía, una niña transexual que sufre acoso escolar. Su madre aprovecha las vacaciones de verano para viajar con sus tres hijos a la casa materna, donde también vive su tía Lourdes, estrechamente ligada a la cría de abejas y la producción de miel. Urresola ha querido “vincular la película con la naturaleza, con la exploración y con el descubrimiento” y a través de las enseñanzas de la tía abuela sobre las abejas y sobre las tradiciones vascas transmite a Lucía “el valor de la diversidad en la naturaleza donde no hay dos cosas iguales, se puede ser distinto y no hay nada fuera de lugar”.

El néctar de la diversidad

La creadora de Llodio ha querido acercarse a la transexualidad con una “visión distinta” al enmarcarla en una “historia de verano ligada a la familia y a la tierra” con la idea de mostrar “una realidad natural”, lejos del “estigma” con el que en ocasiones se aborda esta temática en la gran pantalla, como este viernes ha explicado a los medios de comunicación invitados a interrumpir por un rato el rodaje. Ante ellos ha contado que la película no trata tanto del “viaje” de Lucía porque “ella siempre ha sido quien es”, sino del resto de la familia cuya mirada y ellas mismas como personas “se van transformando”. l

El néctar de la diversidad