a peripecia de Beth Harmon, el personaje de ficción interpretado por la actriz estadounidense Anya Taylor-Joy, se ha convertido en un récord para la plataforma, vista por más de 62 millones de hogares en el primer mes tras su estreno el 23 de octubre, la más seguida de su catálogo en 63 países y entre las diez más vistas en otros 92.
Un éxito que va más allá de las pantallas: la novela en que se basa la serie, obra del estadounidense Walter Tevis, está en la lista de libros más leídos del periódico New York Times treinta y siete años después de ser publicada, las búsquedas en Google sobre cómo jugar al ajedrez están en su punto más alto en nueve años y la venta de libros de estrategia ajedrecística ha subido un 600% en Estados Unidos, según la consultora NPD.
La capacidad de las series para poner un tema en la conversación no es nueva, acelerada en un tiempo de mayor consumo de ocio en casa como ocurrió con la serie sobre Michael Jordan El último baile, que multiplicó un 5.000% las ventas en la web eBay de productos de los Chicago Bulls de la NBA en el día de su estreno -821 peticiones por minuto-, pero para el ajedrez era totalmente inesperada. “Nadie se esperaba esto; cuando ves que sale la serie en octubre y empieza a gustar, nadie lo imaginaba. Para el mundo del ajedrez es un regalo”, aseguró a Efe David Martínez, director de la web Chess24 en castellano. Bajo su punto de vista la serie está “muy bien lograda” en cuanto a que consigue capturar “la intensidad y emoción de un torneo” y lo que rodea a la competición más allá del tablero, así como la preparación de las partidas. “Todos los ajedrecistas nos vemos reflejados y a la gente le entran ganas de jugar”, afirma.
Martínez es el responsable de la versión en español de una página que ofrece retransmisiones de torneos, noticias y vende cursos. Los datos le muestran los mejores números de audiencia desde noviembre de 2018, cuando se produjo el Mundial en el que el noruego Magnus Carlsen se impuso al estadounidense Fabiano Caruana. “La buena noticia es que no es solo gente que pasa, sino que se ha animado a quedarse, interesarse por otras cosas, comprar productos (...) Nosotros tenemos una suscripción premium y hemos vendido un 200% que el mes que mejores números habíamos tenido”, asegura Martínez.
El impacto de la serie ha multiplicado el despertar del ajedrez durante la pandemia. La plataforma de vídeo en directo Twitch -mayoritaria entre los usuarios de los videojuegos- comenzó a tener al ajedrez como una de sus categorías más vistas entre marzo y agosto, cuando acumuló más de 41,2 millones de horas vistas.
No obstante, su influjo también llega a los comercios de a pie, tan castigados este año por la pandemia de coronavirus. En la madrileña La Casa del Ajedrez, en el barrio capitalino de Chueca, aseguran que han recibido “un aluvión” de clientes. “Nos ha potenciado mucho las ventas, estamos muy contentos y también algo atribulados por el trabajo. Por momentos no ha superado un poco”, asegura a Efe el director de esta tienda, Andrés Tijman. Ellos, como otros muchos, se han visto obligados a digitalizarse por la crisis sanitaria, digitalizando su fondo editorial y ofreciendo clases a través de Internet. “No sé si es una combinación de la pandemia y Gambito de dama, lo que sé es que estamos vendiendo juegos, tableros y libros como nunca”, añade Tijman.
Algo más tardará en llegar la ola de Netflix al ajedrez federativo, admite el presidente de la Federación Española de Ajedrez (FEDA), Javier Ochoa de Echagüen. “A corto plazo, tener datos sobre cómo se refleja en los federados es imposible, pero lo que está claro es que mediáticamente su impacto ha sido muy importante. Está hablando de ella todo el mundo, hasta la gente que no juega al ajedrez”, valora el presidente de la FEDA. Ochoa comparte la impresión positiva sobre la fidelidad de la serie al ambiente ajedrecístico de los años 60. “He leído que Garry Kasparov les asesoró en aspectos técnicos y el ambiente de los torneos y la época está muy bien logrado”, añade.
La serie tiene una protagonista femenina, algo que ni en el ajedrez de los 60 era común, ni lamentablemente lo es en esta época, aunque la situación haya mejorado. “El ajedrez sigue siendo bastante masculino, hay un 11% de jugadoras, y aún así ha crecido. En los últimos cinco años las mujeres han pasado de suponer un 4% a un 11%. También desde la Federación estamos haciendo un esfuerzo muy grande”, agrega Ochoa.
“Que sea una mujer la protagonista es un acierto, es un personaje atractivo, que incita a querer que le vaya bien. Ojalá se note a la larga a que se acercan más mujeres. Se está trabajando en ello, animando a que haya más niñas empezando a jugar, pero aún así el porcentaje es muy bajo”, valora el director de Chess24 en castellano. Si el personaje interpretado por la estadounidense Anya Taylor-Joy puede acercar a más jugadoras a los tableros, podría ser un segundo regalo que Gambito de dama haga al ajedrez. Sus aficionados, a la espera de saber si habrá una segunda temporada, ya están paliando la impaciencia entre tableros y peones.