"Cada carta es alucinante. Así que regala arte, ¿qué mejor inversión hay?". Lo dice el actor Gorka Aguinagalde en un vídeo que se ha lanzado para apoyar la campaña de micromecenazgo. Quedan 28 días y a través de la página web www.verkami.com, cualquiera puede seguir el consejo del intérprete gasteiztarra para hacerse con una de las barajas del tarot que ha creado el fotógrafo César San Millán. "En realidad, Sorat (El sol negro) es una obra personalSorat (El sol negro), lo que pasa es que la aparición de Zas en este proyecto ha hecho que sea una obra total", apunta, por su parte, el creador. De hecho, es el espacio cultural de la calle Correría el que impulsa este proceso de crowdfunding, que ofrece la posibilidad de hacer diferentes aportaciones entre 25 y 1.000 euros.
"La premisa de esta creación fue hallar qué pasa con los residuos de la creación. No podemos perder de vista que siempre que hay una acción hay un residuo y también es conocedor de dónde viene y quiere ser reconocido como parte de la unidad. Algunos los llaman demonios, otros arcángeles...", describe San Millán a la hora de presentar una propuesta que "con osadía" ha titulado Sorat y que, más allá de las cuestiones inherentes al tarot, ofrece un trabajo fotográfico cuando menos sugerente y atractivo. "Ha sido una carga de trabajo fuerte, eso es verdad. Sacar los arcanos mayores han sido casi dos años; los menores, como tienen una colocación específica de los bastos o las copas, me costaron menos tiempo, fue algo que pude realizar durante el confinamiento", define el autor.
Más que mostrar de manera explícita, el creador busca sugerir intenciones. "El resultado tiene un elemento mágico que no inspira belleza pero que reivindica el residuo como parte de la creación. Hay que tenerlo en cuenta", señala San Millán, que destaca el interés y la fascinación que siempre ha despertado el tarot y todo lo que conlleva, las cuestiones a las que hace referencia y que tienen que ver, al fin y al cabo, con el conocimiento. "Estamos hablando de connotaciones muy importantes que se han usado, a lo largo del tiempo, como han convenido en algunos casos, como es el caso de la iglesia".
Como explican desde Zas, "el tarot posee una poderosa particularidad: es una creación colectiva, de toda la humanidad. Y de su historia: su origen se pierde por los sigilosos recovecos del largo túnel del tiempo. Es, por lo tanto, un crisol en el que se funden las aportaciones de diversas gentes, civilizaciones etnias, religiones, culturas€". En este contexto "a lo largo de la historia, muchos han sido los artistas que, fascinados por el tarot, se han encargado de moldear sus imágenes. En el año 1760, por ejemplo, Nicolas Conver creó el Tarot de Marsella, uno de los más conocidos mundialmente. Se trataba del primer mazo utilizado por ocultistas para la adivinación. En 1970 el surrealista Dalí, como no, creó un tarot para fines esotéricos. Y ahora San Millán ha pergeñado su propio tarot. Una obra realizada íntegramente por él. Con una visión totalizadora, operística, que aglutina un sugerente universo de imágenes oscuras, perturbadoras, cargadas de simbología. Un universo personal, fruto de destilar y volcar en él sus experiencias, vivencias y pensamientos. Un complejo sistema solar en el que todos los elementos se relacionan conceptual y formalmente entre sí girando alrededor de un inmenso sol negro".
En principio, la campaña de micromecenazgo terminará el próximo día 28. De conseguirse el objetivo, la producción de la baraja se llevará a cabo durante el mes de enero y el envío de la misma se realizaría durante la última semana del primer mes de 2021. Solo queda que más personas interesadas se sigan sumando a la propuesta y a quienes ya han hecho su aportación.