n libro de culto, pero no para cultos”, así es Stephen King. Guía ilustrada del maestro del terror, la biografía que va más allá de la vida de este autor que nos ha hecho temblar de miedo con una literatura del más alto nivel que, quizá por haberse convertido en popular, no está reconocida como se merece.
Quizá sea este el motivo de más peso para que el padre de It o Carrie no esté en la quinielas de ninguno de los más prestigiosos premios de literatura, pero quizá también ésta no sea una de sus mayores preocupaciones porque King (Maine, Estados Unidos, 1947) ha conseguido algo que muchos autores y autoras solo pueden soñar: ser un escritor de “culto” con más de 350 millones de ejemplares vendidos.
Así lo considera Javier Ortega, el director editorial de Lunwerg, la editorial que publica este “libro que hacía falta, un libro de culto pero no para cultos”, cuya autoría está firmada por Matthieu Rostac y Francois Cau, responsables de este repaso profundo por el trabajo del creador de una estética sin igual, del padre de los personajes más terroríficos de la literatura y del creador de ambientes que casi dan tanto miedo como las personas que los habitan. Pero el universo de King tiene “un gran tabú”: “habiéndose dedicado a un género como el terror se ha convertido en algo popular, y cuando los galardones premian excelencia parece que hay pudor porque lo popular sea excelente”, afirma.
En concreto, esta obra viene a continuar la línea de biografías ilustradas de Lunwerg -en la que están la de West Anderson o Tim Burton- y en ella se hace un recorrido por los perfiles de sus criaturas, por las adaptaciones al cine de sus libros -más de 80- o por la estética de la cartelería y la estética de su mundo.
Porque lo que han hecho Rostac y Cau es replicar las ilustraciones de las portadas y carteles cinematográficos de todas las obras, así como recuperar la tipografía y gráficos de todo lo que envuelve a la obra de King. Pero también cabe destacar el “infinito valor de documentación” que existe en las páginas de esta biografía: “No creo que haya nadie que sepa más sobre King que estos autores, ni el propio protagonista debe tener en mente este tipo de referencias”, resalta.
Se refiere Ortega a datos que contiene el libro como el número de cameos de King en las adaptaciones de sus obras: “Ha salido en un montón de películas haciendo de todo, camionero, enterrador, jardinero...”.
Asimismo, esta obra nos pone de manifiesto, con el negro, el rojo y el verde como protagonista de las ilustraciones y los gráficos, como King está en todo, cómo ha conseguido crear una estética que va más allá de la capacidad de erizarnos la piel, una estética que abarca hasta las notas de las bandas sonoras de sus historias.
Y por todo esto, el editor jefe de Lunwerg puntualiza que “urgía una revisión de Stephen King porque sabiendo que no es alta costura japonesa, es un género bien documentado, perfectamente narrado”.
Stephen King. Guía ilustrada del maestro del terror se convierte así en un libro no solo apto para amantes de King, sino para aquellos que en algún momento han sentido curiosidad por sentir el miedo en sus huesos.
Es el padre de los personajes más terroríficos y el creador de ambientes que casi dan tanto miedo como las personas que los habitan