El cineasta español Álex de la Iglesia estrenó hoy en el Festival de Venecia fuera de concurso el primer capitulo de su serie "30 Monedas", con la que ha recordado que los exorcismos y la pugna contra el Maligno "todavía existen".

"Los exorcistas aún existen, la lucha contra el diablo no es una broma, es algo que realmente sucede en Roma y los más importantes y relevantes creyentes en el diablo son los propios católicos y los curas", defendió el director en la rueda de prensa de presentación.

De la Iglesia ha regresado a Venecia, donde ganó en 2010 como mejor dirección y guión por "Balada triste de trompeta", para presentar esta vez su serie "30 Monedas": "Creo que es la más seria e incluso dramática que he hecho", aseguró.

"30 monedas", como las piezas de plata que recibió Judas Iscariote por traicionar a Jesús de Nazaret, es un mundo en el que nada es lo que "a priori" parece.

La trama arranca en el municipio segoviano de Pedraza, donde vive recluido el Padre Vergara (Eduard Fernández), un enigmático exorcista y boxeador con un doloroso pasado en la cárcel.

Su intención es olvidar sus batallas pretéritas en la calma de esa localidad castellana, aunque sus diabólicos enemigos pronto le encontrarán, desbaratando su vida y la de todo el pueblo.

Álex de la Iglesia explicó que ahondó en la figura de Dios y del demonio durante sus estudios de Filosofía junto a muchos sacerdotes pero en su cine siempre lo abordó desde un punto de vista "cómico y cínico", como en su segunda película "El día de la bestia" (1995).

"Ahora las cosas han cambiado y desde luego esta serie es dramática, de terror, en la que existe un punto de vista si quieres costumbrista o naturalista a la hora de abordar el terror, pero en ningún caso cómica", defendió desde el certamen italiano.

Para la realización de todo este mundo el director se inspiró por supuesto en el clásico "El Exorcista" (1973) y en un documental sobre su creación que su autor, William Friedkin, presentó precisamente en la Mostra de hace un par de años.

Pero precisó que también esconde "personajes reales", como el caso del Padre Fortea, experto español en demonología.

Para él su protagonista es "una especie de Rambo", un soldado que vive en un pequeño pueblo en el corazón de España hasta que revive sus batallas del pasado en medio de un ambiente paranormal.

"Siempre estuve obsesionado con las películas de terror pero al mismo tiempo soy católico", reconoció.

De la Iglesia cree que esta pugna eterna entre el bien y el mal es "tan bella que debía ser usada" y por ello empezó esta producción para HBO que cuenta en su reparto con Pepón Nieto, Macarena Gómez, Megan Montaner, Miguel Ángel Silvestre y Manolo Solo.

Silvestre, que encarna al alcalde del pueblo, apreció el trabajo del director y el "tono y el color" que ha dado a este "mundo".