alguien se le ocurrió que en las vacaciones de verano echaríamos de menos el material escolar y se inventaron el Mikolapiz, el Vacaciones Santillana de los helados. ¿Un helado que recuerde al cole? Pues hubo clientela. Pero lo mejor eran sus anuncios. En el primero dibujaban con el Mikolápiz cosas como unas tijeras para cortarle el bikini a una chica que estaba en la playa y dejarla en tetas. El segundo, a dúo con otro helado de la casa Miko, era de lo más pasivo-agresivo: "Te vas a comer el lápiz, te vas a tragar las gafas", se amenazaban un niño y una niña y, dicho y hecho, se zampaban los helados de Mikolápiz y Veo veo, y tan amigos. El helado, por cierto, venía (y viene, que sigue en el mercado) dentro de un tubito de plástico que ibas empujando para que saliera a flote según te lo ibas zampando y que luego, por lo que fuera, te negabas a tirar. Hoy, Mikolápiz es un submarca de Pirulo de Nestlé. J. Gorriti

Mikolapiz

Helado sabor vainilla con relleno de cacao cuya punta ya no viene descubierta y hay que encontrarla dentro. También se comercializa con sabor chocolate. Desde 1995 Miko forma parte de Nestlé.