bilbao - El artista danés Olafur Eliasson exhibe desde hoy en el Museo Guggenheim Bilbao los juegos de luces en combinación con la geometría que predominan en sus obras de los últimos 30 años, en la exposición con la que el centro expositivo bilbaíno abre su temporada de muestras temporales de 2020.

La exposición titulada Olafur Eliasson: en la vida real, supone un recorrido por la trayectoria del artista danés a través de una treintena de obras creadas entre 1990 y 2019 que incluye esculturas, fotografías, pinturas e instalaciones como una réplica de sus famosas cascadas, instaladas en lugares públicos, como el East River de Manhatan (Nueva York).

Eliasson (Copenhague, 1967) y que en 2015 optó al Premio Princesa de Asturias de las Artes que ganó el cineasta Francis Ford Coppola, es uno de los artistas multidisciplinares y experimentales más destacados del actual panorama europeo que ha expuesto en relevantes museos del mundo como la Tate Modern de Londres, el Museo de Arte Moderno de Nueva York (Moma) y el Reina Sofía. Ahora llega con sus obras a Bilbao, después de haber estado el año pasado de nuevo en la Tate Modern, centro que ha colaborado con el Guggenheim en la elaboración de la exposición, según explicó ayer el director del centro bilbaíno, Juan Ignacio Vidarte, en la presentación a los medios.

cambiar el mundo y las personas Vidarte destacó la preocupación del artista danés por extender los límites del arte y explorar su relación con la ciencia y con el mundo que nos rodea "desde la convicción del potencial que tiene el arte para cambiar el mundo y las personas".

Esta pretensión del artista danés de conseguir que el espectador aprecie la realidad del mundo en el que vive es la que ha dado título a la muestra y se concreta en la última pieza realizada por Eliasson, titulada En la vida real (2019), que consta de una gran esfera de aluminio colgada del techo y conformada por numerosas estructuras geométricas triangulares que en su interior rodean una luz que proyecta sobre la pared y el suelo un juego de luces de distintos colores.

La exposición permanecerá en el Guggenheim Bilbao hasta el 21 de junio y está sustentada por la compañía energética Iberdrola, patrono estratégico del Museo desde su fundación en 1997. - Efe