Más de 2.000 niños, niñas y jóvenes de Euskadi están repartiendo durante estos días prenavideños cartas personalizadas a cerca de 3.000 personas mayores que residen en centros residenciales y de día del territorio. La iniciativa solidaria, titulada Una carta para ti, alcanza este año su tercera edición y consolida su crecimiento como un proyecto de conexión intergeneracional impulsado por Hirukide a través de su área juvenil, Hirugazte.
En esta edición han participado 2.138 estudiantes de 44 centros educativos de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, que han redactado a mano un total de 2.929 cartas dirigidas a personas mayores de 49 residencias y centros de día. El objetivo de la iniciativa es reforzar los vínculos entre generaciones en las semanas previas a la Navidad, fomentar la comunicación escrita y promover valores como la empatía, la solidaridad y el respeto hacia las personas mayores.
238 alaveses
Por territorios, en Álava participan 238 alumnos y alumnas de siete centros educativos, en Bizkaia 973 estudiantes de 17 centros y en Gipuzkoa 927 jóvenes de 19 centros. Las cartas se reparten en 11 residencias y centros de día de Álava, 20 de Bizkaia y 18 de Gipuzkoa. En Álava, tras las visitas realizadas el pasado 12 de diciembre en las residencias de Salburúa Ricallor y Agure, y el 17 de diciembre en Afaraba, el 22 de diciembre se completó el calendario con la visita al Club Deportivo Amurrio.
meses de preparación El proyecto comenzó a organizarse el pasado mes de septiembre, cuando Hirugazte invitó a participar a centros públicos y concertados de Euskadi, desde 5.º de Primaria hasta Formación Profesional. Paralelamente, se estableció contacto con residencias y centros de mayores cercanos a cada escuela, que facilitaron los nombres y algunos datos personales de las personas destinatarias para poder personalizar las cartas. De este modo, el profesorado pudo trabajar la actividad en el aula como parte del proceso educativo.
Tres visitas en Álava
Una vez fijadas las fechas, el alumnado ha comenzado a entregar las cartas en mano y, en muchos casos, a leerlas personalmente a las personas mayores. Las visitas se prolongaron durante las tres primeras semanas de diciembre y, en algunos centros, se completaron con actividades adicionales como villancicos o pequeños cuidados de bienestar, como manicuras y masajes de manos, realizados por estudiantes de ciclos formativos de estética.
Desde Hirukide destacan que el impacto positivo de las dos primeras ediciones ha provocado que algunos centros educativos y residencias hayan comenzado a replicar la iniciativa por su cuenta, organizando intercambios de cartas y visitas sin mediación directa de la entidad. Estas experiencias, que no figuran en las cifras oficiales, confirman la organización la capacidad del proyecto para inspirar nuevas iniciativas sociales y educativas.
Para las personas mayores, recibir una carta personalizada supone un momento de especial emoción y conexión, especialmente para quienes llevaban años sin recibir correspondencia. Para muchos jóvenes, en cambio, es la primera vez que escriben una carta a mano o que visitan una residencia de mayores, lo que convierte la experiencia en un aprendizaje vital difícil de cuantificar.
El valor social de Una carta para ti ha sido reconocido recientemente con el Premio del Consejo Social de Donostia, que ha destacado la contribución del proyecto al fortalecimiento del tejido social y al fomento de la solidaridad intergeneracional. Un reconocimiento que refuerza la voluntad de Hirukide de consolidar la iniciativa como una cita anual en el calendario navideño.