Vitoria - La Casa Encendida de Madrid acogerá desde el próximo jueves a los creadores ganadores, de entre los casi 300 presentados, al certamen Generaciones 2020, una apuesta que se produce cada año para mostrar los diferentes canales de creación en los que trabajan los jóvenes artistas residentes en el Estado. Su principal objetivo es ofrecer una plataforma, dedicada al arte actual, para compartir el trabajo de jóvenes creadores y difundir estas propuestas entre la crítica especializada y el público general. Esta vez, el jurado ha estado compuesto por Lisette Lagnado, comisaria de la 11th Berlin Biennale for Contemporary Art, Fernando Pérez, director de Azkuna Zentroa Alhóndiga Bilbao, y Marta Rincón, responsable de Artes Visuales, Arquitectura y Diseño en Acción Cultural Española. Ellos han seleccionado los 8 proyectos ganadores dotados con 10.000 euros cada uno, un listado en el que se encuentra Gala Knörr gracias a su propuesta Good Bad Not Evil.

En el certamen Generaciones 2020, con Knörr han sido seleccionados los proyectos de Javier Arbizu, Elisa Celda, Oier Iruretagoiena, Claudia Rebeca Lorenzo, Miguel Marina, Cristina Mejíasy Nora Silva. La exposición que les va a a reunir a todos ellos va a permanecer abierta en La Casa Encendida hasta el próximo 26 de abril.

“Para mí, recibir este premio fue un golpe de emoción, y un empuje de ánimo y fuerza para seguir investigando, seguir creciendo, y hallar mi sitio como creadora con infinita curiosidad sin perder mi capacidad de asombro y sorpresa”, explica la autora vitoriana. “Parte de este proyecto se empezó a idear hace tiempo como una reacción a la época en la que a mi generación nos ha tocado vivir desde nuestra adolescencia, una era en la que la verdad, el sentido común y los hechos han perdido fuerza, y en la que existimos en múltiples realidades a través de internet, que afectan a nuestra vida diaria tomando fuerza cada vez un futuro incierto pero altamente distópico. Mi instalación es una amalgama de esa corriente de información incesante que procesamos diariamente a través de los medios, utilizando iconos reconocibles de la cultura popular con la que los millenials hemos crecido, los cuales son también iconos resignificados hoy día para la Generación Z”, describe. - C.G.