Valencia - Esculturas metálicas de reminiscencia griega con escenas sexuales muy detalladas, del artista alcoyano Antoni Miró, inundan la Marina de Valencia sin escapar de la polémica entre los que ensalzan la exposición por tratar el sexo con naturalidad y los que la consideran demasiado explícita para un espacio público de ambiente familiar.

Se trata la exposición impulsada por Presidencia de la Generalitat y la Conselleria de Cultura con la que se va a inaugurar La base, el nuevo espacio cultural en la que era la sede del equipo suizo de la Copa del América.

Fernando Castro, el comisario de la exposición de las esculturas de Antoni Miró que ha generado controversia por su contenido sexual, ha mostrado su sorpresa por la polémica y ha sostenido que “parece que preocupa más el erotismo” que la corrupción o el terrorismo. Estas piezas que recrean el arte clásico, troqueladas en láminas de acero corten, y sus dibujos lineales, tanto figuras recortadas como sus moldes, exhiben cuerpos desnudos en los que se distinguen penes, senos y genitales femeninos y protagonizan escenas en las que están a punto de practicar una penetración o una felación. - Efe