Madrid - Alba Carrillo desde que participó en Supervivientes ha obtenido un cheque al portador en lo que se refiere al interés mediático.

Aunque la ganadora no fue ella, si no el cocinero José Luis, gran merecedor del premio porque fue un buen concursante, en el caso de la ex de Feliciano el duopolio con su madre Lucía Pariente dio mucho de sí. Las broncas y los desplantes con algunos de los participantes fueron memorables. Alba moviendo sus brazos como si fueran las aspas de un molino, Lucía con machete en mano partiendo el bambú de un golpe seco... y así durante días hasta que la madre fue expulsada y la modelo recobró la estabilidad emocional y dio juego.

Una vez volvió a la civilización, ha participado en algún programa pero no ha ofrecido ninguna exclusiva en papel. De hacer caso a los rumores, la razón de esta pasividad mediática tendría que ver con un posible posado diferente a lo que ha hecho hasta el momento.

Se trataría de un reportaje con fotografías sensuales que mostrarían a la modelo como no se la había visto ni tan siquiera en la isla. Según parece, la cifra que se rumorea que podría haber pedido la modelo para publicar esas imágenes rondaría el millón de euros.

Vanitatis se ha puesto en contacto con Carrillo para que aclare la historia, y en todo momento ha negado: “No es verdad. No sé de dónde ha salido esta información. Nadie me ha hecho esa oferta, ni he negociado nada. Lo niego rotundamente”.

Las dos únicas publicaciones que podrían ofrecer ese tipo de reportaje serían Interviú y Playboy. La edición española de la mítica revista norteamericana ha apostado, desde su primer número, por mujeres con gran interés mediático como Ana Obregón, que fue portada a sus 63 años y todo un éxito de ventas. Después apareció Elena Tablada con un posado sensual y ahora podría ser Alba Carrillo. La dirección de la revista se puso en contacto con la superviviente, que en principio no declinó la propuesta.

Según confirman a Vantitatis la propia directora de Playboy: “Nos pidió cuarenta mil euros, pero luego vimos que tampoco nos daría mucho juego porque nosotros no hacemos entrevistas solo de corazón, por lo que el precio era elevado”. - DNA