Junto a Korrontzi. El polideportivo de Mendizorroza vivió ayer una de las jornadas más importantes de la cuarta edición del Aitzina Folk, certamen solidario cuyos beneficios se destinan a financiar estudios de investigación sobre la ataxia telangiectasia. El cartel se abrió de la mano de los vizcaínos Korrontzi, que reunieron a centenares de bailarines en una actuación muy especial en la que música y danzas vascas se hicieron uno. Después fue el turno de Gwendal (en las imágenes durante las pruebas de sonido), grupo bretón que ha escogido Gasteiz como primera parada de la gira internacional que va a desarrollar a lo largo de 2017 para celebrar sus 45 años de actividad. Foto: Josu Chavarri