Madrid - El escritor mexicano Gonzalo Celorio, tras escribir El metal y la escoria, tiene claro que la literatura es sana y ejerce labores de exorcismo, porque gracias a este libro, según argumentó en una entrevista, pudo rescatar la memoria perdida de su familia y alejar el miedo al alzheimer. Una enfermedad que perjudicó a su padre y hermano, de la que el autor habla en el último capítulo de esta epopeya familiar sobre tres generaciones que conforman un friso sobre la historia de México de 1874, hasta el exilio español republicano, con episodios entrelazados con la revolución cubana o nicaragüense.

“Es un libro cuyo primer manuscrito es de 1973 y no es que haya tardado 40 años, sino que cuando eres joven uno no tiene los instrumentos para hacer esta ambiciosa novela”, explicó Gonzalo Celorio.

“Es una historia que me han vetado durante toda mi vida -explicó-, pero un escritor es curioso y como no había nada publicado sobre personas que eran anónimas, he tenido que utilizar también mi imaginación”, subrayó.

Y es que el abuelo de Celorio, desde que llegó a México en 1874 y empezó a trabajar de tendero fue amasando una gran fortuna, que después se encargaron de perder su hijos en “alcoholismo y parrandas”, salvo el padre del autor.

Pero la novela también recoge varios capítulos de la historia; por un lado, la emigración española de finales del XIX y por otro el exilio español republicano “y estas dos Españas de signo contrario y contrapuesto han tenido una incidencia fundamental”, matizó el autor.- Efe