Vitoria. Esta crisis económica va camino de cumplir ya seis años y, por mucho que algunos se esfuercen en ver brotes verdes donde sólo hay tierra quemada, va camino de celebrar algún cumpleaños más. Momentos que, sobre todo en determinados países de Europa, han llevado a miles y miles de ciudadanos a protestar. Es más, hoy se habla con naturalidad de mareas blancas, verdes... dependiendo del sector afectado por los recortes. Y en ese contexto, un Albert Pla que siempre ha estado al margen de lo establecido ha decidido montar su propia Manifestación.

Así se llama el último espectáculo del multifacético artista, un montaje que hoy llega a Agurain para formar parte de la temporada primaveral de la sala Harresi. Será, en concreto, a partir de las 19.30 horas, estando las entradas a la venta por 12 euros, salvo en el caso de los poseedores de la tarjeta del teatro (en cuyo caso costarán 10).

Teatro y música van desde hace tiempo unidos con Pla, y en este caso no habrá excepción. Ambos se fusionarán para relatar, desde la acidez de la que sólo es capaz el humor, esta historia de un hombre que un día fue a participar en una manifestación y se quedó atrapado en ella, sin poder salir, apareciendo en otras protestas sin saberlo, incluso sin estar de acuerdo con los motivos, hasta que llega un momento en el que no sabe ni en qué concentración se encuentra ni en favor o en contra de qué. Todo ello contando con el inconfundible sello Pla.