En los espacios habituales y en el paraninfo. Imposible encontrar un hueco libre para exponer en la Escuela de Artes y Oficios. Tres propuestas bien diferentes que a su vez tienen múltiples protagonistas y que hoy se abren al público. Como artista invitada, Carmen Manjón, que presenta una serie de acuarelas bajo el título Iluminando las sombras. El espacio para los estudiantes es propiedad de los 72 niños y niñas de entre 4 y 8 años que componen el Talle de Creatividad Infantil, que con el pop art como referencia componen Latido en pop. Pero a la programación habitual del espacio se unen en esta ocasión los tres ganadores del certamen de artes plásticas del centro, Almudena Bravo (Luminarias), Myriam de Miguel (La burla de los sentidos) y Aitor Salazar (Té verde, té a la menta).

Los trabajos que antes se despedirán de los ojos y los sentidos de los visitantes serán los que se encuentran en el paraninfo. Hasta el 7 de mayo, Bravo, De Miguel y Salazar conviven y lo hacen "en armonía", según ellos mismos explican. La primera propone una serie de piezas realizadas en cerámica en la que la forma y la iluminación dialogan. "Me gusta ir por la noche y ver a través de las ventanas de las casas, si hay cortinas, si no, qué se puede ver... y estas obras son esas ventanas". La segunda invita a activar la percepción del visitante para que complete unas pinturas "de temas abstractos, abiertos a lo que cada uno perciba". En el caso del tercero es la fotografía la que toma protagonismo para, a través de imágenes tomadas en Japón y Marruecos con el té como excusa, "ver que, aunque yo iba buscando los contrastes entre los dos países, cuando se apaga la luz somos muy parecidos", a lo que también se une una reflexión sobre el viaje.

Hasta el 24 de mayo permanecerán las otras dos muestras, las ubicadas en los espacios habituales que Artes y Oficios reserva para su programación expositiva. En el caso de Manjón casi una treintena de acuarelas, la mayoría hechas antes de 2009 aunque también se añaden piezas realizadas en los últimos meses, dibujan su acercamiento al paisaje, su particular mirada pero, además, su gusto por la utilización de materiales no habituales. "Tengo ganas de seguir investigando con nuevos productos", como hace aquí con pigmentos traídos desde India.

Junto a ella, las dos propuestas llevadas a cabo por los más pequeños. Por un lado, un gran mosaico con las caras de los participantes, siguiendo la línea de Andy Warhol. Por otro, diferentes composiciones de personajes de series infantiles realizadas con etiquetas de distintos productos. "Se trata de aprender y divertirse", señalan sus profesoras.