DONOSTIA. Las autoridades francesas prohibirán el acceso al pico de Bugarach, donde se encuentra el único pueblo que, según algunas profecías, se salvará del hipotético fin del mundo anunciado por los mayas el próximo 21 de diciembre.
Según los supersticiosos, el día del solsticio invernal, que marca el fin del calendario antiguo maya, supondrá también el fin del mundo. Sin embargo, algunos aseguran que Bugarach, una pequeña aldea de unos 200 habitantes en el departamento de Aude, al suroeste de Francia, será uno de los pocos lugares de la Tierra que sobrevivirán al fin del mundo.
Argumetnan que la cima del monte, que alcanza los 1.230 metros de altitud, alberga una especie de cosmódromo construido con piedras mágicas que sirve de refugio para los extraterrestres. El día del armagedón, los alienígenas supuestamente partirán de nuestro planeta desde ese punto y llevarán consigo a un grupo reducido de seres humanos.
Aunque miles de peregrinos de distintos puntos del planeta planeaban desplazarse allí mañana, las autoridades francesas anunciaron este viernes que prohibirán 3 días antes y 2 días después de esa fecha el acceso al pico de Bugarach. Jean-Pierre Delord, alcalde del pueblo, explicaba que la decisión de prohibir el acceso supone todo un alivio, ya que durante meses el lugar se ha visto invadido por turistas, curiosos y miembros de sectas que arruinan el patrimonio natural con su intención de llevarse las 'piedras mágicas'.